Cuando estamos pasando por situaciones complicadas, una de las cosas que más le pedimos a Dios, la Vida o el Universo es que estás desaparezcan de la noche a la mañana.
Y junto con esto, esperamos que nuevas oportunidades vengan a nosotros para mejorar nuestra vida.
¿Pero sabías que cuando estás en medio de dificultades, es más factible que esas nuevas “oportunidades”, también sean nuevos fracasos?
Para poder entenderlo mejor, hay que ser conscientes que nuestro mundo exterior, es un reflejo del mundo interior.
Es decir que lo malo que consideras que estas viviendo es consecuencia de las decisiones que has tomado.
Estas son dirigidas principalmente por nuestras emociones.
Si tú por ejemplo acabas de sufrir una perdida familiar o una decepción amorosa, lo más seguro es que las decisiones que tomes van a ser bastante erradas.
Así pues, cualquier “oportunidad” que llegue a tu vida no necesariamente es eso, una oportunidad y mas bien puede ser el principio de otra caída.
Es por eso que un dicho de la sabiduría popular reza “el Diablo aparece cuando estamos más desesperados”.
Esto hace clara referencia que, si tus emociones están mal, de seguro tu vida seguirá en picada.
Respecto a esto, hace ya mas de una década cuando todo a mi alrededor se derrumbó, una de las pocas entradas de dinero que tenía era como Web Master.
Este trabajo lo realizaba para una oficina de abogados internacionales.
Una vez viajé a mi ciudad natal a verme con uno de ellos y de paso cobrar mis honorarios.
En esa oportunidad conocí a un abogado español, al cual le caí muy bien.
Incluso me compartió un buen libro que tenía titulado “El hombre en busca del sentido último”.
Que fue escrito por el psiquiatra austriaco Victor Frankl, que narra la historia del autor en un campo de concentración durante la segunda guerra mundial.
Posteriormente este abogado viajo a su ciudad y unos meses después recibí una llamada telefónica de su parte.
Me contó que estaba defendiendo a un señor colombiano en los tribunales españoles.
Y que este había sido capturado por haber dicho en una llamada telefónica que le pasara las 15 lucas.
Los representantes de la ley española consideraron que por ser colombiano y decir esta palabra lucas se estaba refiriendo a otra cosa más delicada.
Tristemente el mundo ve a los colombianos como delincuentes que solo trafican sustancias ilícitas.
Este abogado me dijo que él no conocía totalmente la vida de su cliente, pero que al menos lo estaban acusando falsamente por emplear la palabra lucas en su llamada.
De hecho, cuando en Colombia se habla de “lucas”, se está haciendo referencia al dinero.
Y adicional a esto, este abogado me dijo que las autoridades españolas habían empleado un método estadístico para el análisis de las llamadas.
Me pidió que le investigara sobre todos los métodos existentes y la posible veracidad en los resultados.
Si mal no recuerdo, el método empleado era el llamado Análisis de Regresión Lineal Múltiple, el cual arrojaba un 95% de exactitud sobre los datos analizados.
Preparé mi informe y se lo envíe al abogado.
Unos días después me llamó diciéndome que basándose en la información que le entregué lo que uso en la defensa de su cliente fue el 5% que le faltaba a ese método.
Y que por lo tanto era una total injusticia, basándose en presunciones lingüísticas, acusar a una persona.
A la final este señor quedó libre y el abogado me dijo que estaba tan agradecido que quería contactarme para enviarme un regalo.
Simplemente le dije que muchas gracias pero que el trabajo que hice de investigación estaba incluido dentro de mis honorarios como Web Master.
En ese momento yo estaba mordiendo cable como decimos en mi país.
Necesitando dinero y un regalo no caía para nada mal.
Pero recordé lo que dijo el abogado al principio sobre el pasado de esta persona.
No se trata de juzgar a nadie, ni mucho menos discriminar.
Muchas veces he afirmado en este blog que todo el mundo es bienvenido, sin importar las ideas que tenga.
Pero a nivel personal intento llevar mi vida lo más correcta posible bajo la luz de las normas establecidas por cada Gobierno.
La mayoría de personas piensan que las oportunidades hay que aprovecharlas.
Pero así mismo les va, y no muy bien que digamos.
Por eso es importante siempre vivir con honor.
El honor te permite tener una conciencia tranquila y la tranquilidad es uno de los pilares del bienestar.
Mira, yo he visto gente que tiene todo, pero no pueden sentarse en una esquina a tomarse un refresco de forma tranquila.
No hay nada mejor en esta vida que tratar a todos con amor y respeto y ver como te regresan eso mismo.
Una persona desesperada no puede pensar correctamente y es aquí donde cualquier “oportunidad” que vea, la toma para seguir hundiéndose más de lo que está.
Quizás en este momento me estés preguntando, ¿pero Gabrielito lindo, entonces si estoy desesperado, como puedo diferenciar entre la salida que me da la Vida y los errores potenciales que me acaben de hundir?
Cuando uno está desesperado es bastante complicado diferenciar entre una oportunidad y un desacierto.
Eso lo puedo hacer yo que he estado trabajando con mis emociones durante muchos años.
Recuerdo que cuando era niño, daban en TV un programa infantil.
Mi sección favorita era la de una niña que cuando quería hacer algo siempre preguntaba, “¿si yo hago esto, que sucederá después?”.
La niña iba visualizando como un evento afectaba a otro tal como pasa al empujar una ficha de dominó caerá tumbando al resto.
Entonces creo que, si no tienes experiencia en estos temas emociones, lo mejor que puedes hacer es preguntarte eso.
Si hago esto, ¿qué sucederá después? Y visualizar las consecuencias de tus actos.
Muchas personas pueden pensar que, si hago esto, posiblemente me paralice y no haga nada a la final.
Dejando pasar las oportunidades que me pueden sacar de donde estoy.
Para eso debes aprender a escuchar tu intuición.
Es esa pequeña “voz” que en realidad es una emoción muy sutil que te dice que algo no esta bien o algo es estupendo.
Así que quiero animarte mediante esta información a ser muy cauteloso con las oportunidades que llegan a tus manos.
Lo más sabio que puedes hacer con tu vida es no esperar a que todo este mal para hacer algo.
Comienza desde hoy mismo a trabajar con tu cambio emocional para que en un futuro recojas el bienestar.