Retoma el control de tu vida. Estrategias efectivas para el control emocional

Mostrando las entradas con la etiqueta parientes. Mostrar todas las entradas
Mostrando las entradas con la etiqueta parientes. Mostrar todas las entradas

lunes, 6 de marzo de 2023

MANIPULACIÓN: ¿Cómo evitar ser víctima de ella?



MANIPULACIÓN: ¿Cómo evitar ser víctima de ella?

Es un hecho que nuestros amigos, e incluso nuestra pareja, vienen a ser personas que incluimos en nuestra vida por elección propia. 


Cosa que no ocurre con nuestros parientes. 


Por ejemplo, tus padres, hermanos y demás parientes cercanos, no fueron tu elección. 


Estos te tocaron contra tu voluntad, y de malas si no te gustan, pues debido a su parentesco, no puedes quitarles el título de padres, hermanos, etc. 


Nadie te preguntó si querías ser hijo de X persona o tener a Y hermano. 


También es cierto que a pesar de esta “imposición”, los llegamos a amar con todo nuestro corazón. 


Y dentro de ese gran amor que les llegamos a sentir, existe una imperiosa preocupación por que les vaya bien en todo lo que hagan. 


Y es aquí donde rayamos en el límite de querer controlar TODO lo que hagan. 


Y quizás en este punto me estés preguntado: “pero Gabrielito lindo, ¿qué hay de malo en sentirse preocupado y querer lo mejor para mi familia?”. 


Bueno, ¿sabías que detrás de esta “preocupación”, tienen su origen en la falta de confianza hacia ti mismo? 


Para poder entenderlo mejor, cambiemos la palabra preocupación por manipulación. 


Y básicamente existen 4 razones por la cuales uno se preocupa o manipula a los demás para que les “vaya” bien en sus vidas. 


La primera de estas razones es la inseguridad. 


A veces las personas se pueden llegar a sentir tan inseguras o incómodas con su propia situación que intentan controlar a los demás para sentirse con poder o auto controlados. 


Otra de las razones por las cuales se puede llegar a hacer esto es por egoísmo. 


Sobre todo, en la actualidad, la gente quiere para ellos la exclusividad de la vida. 


Por lo tanto, no les “conviene” que otros logren o consigan lo que ellos han estado persiguiendo. 


Así pues, intentan manipular para obtener lo que quieren o no dejar que los demás avancen más que ellos. 


Y con estos ojitos que tantas cositas bonitas han visto, sí que he podido observar este tipo de casos. 


La inseguridad emocional puede llegar a ser una de las razones más poderosas para intentar manipular a otros. 


Pues las personas que tienen problemas emocionales intentan controlar a los demás, como una forma de compensar sus propias inseguridades. 


Por ejemplo, si una mujer no se siente segura de su belleza y ve a otra más linda, ¿adivina que va a ocurrir? 


Lo mismo puede ocurrir si un hombre inseguro va a comprar un vehículo y otro a su lado compra uno mejor, lo más seguro es que va a intentar convencerlo que no es bueno, que no lo merece y bla bla bla. 


Y como 4ta razón estaría la necesidad de aprobación. 


Es una razón que se ve muy poco, pero una persona puede manipular a otra con el fin de sentirse más valorada. 


Pero como puedes apreciar, todas las razones anteriores, tienen como fundamento la falta de confianza en uno mismo para sentirse más poderoso y en control de los demás. 


Ya que su vida no la tiene bajo control, un manipulador va intentar controlar la vida de los demás. 


Es por eso que las consecuencias de intentar manipular a otros siempre caen en conflictos con las personas. 


¿Ahora comprendes porque cuando intentas “ayudar” a un pariente terminas en peleas con él? 


No es porque seas un metido en vidas ajenas, sino porque el ser humano no está hecho para obedecer a otros. 


Y cuando lo hace, en su interior nace un sentimiento de culpa, vergüenza y desolación que lo pueden destruir. 


Y quizás me estés preguntando en este momento: “Gabrielito lindo, ¿qué puede hacer uno si alguien intenta manipularlo?” 


Muy simple, mándalo a la V.... 


Hablando en serio, todos tenemos la capacidad de detectar cuando alguien nos intenta manipular. 


Que nos hagamos los locos y que el cuento no es con nosotros es otra cosa. 


¿Has notado que cuando alguien te dice algo o hace algo, en ese momento te sientes incómodo? 


Bueno esa es la capacidad de nuestra intuición que nos está información que algo no anda bien. 


Que esa persona está haciendo algo que no es correcto. 


Bueno la solución a esto, es definir tus límites, lo que quieres y te conviene y aprender a decir NO, paso, con firmeza. 


No hay necesidad de ser un patán o irse a los golpes con la gente para dejar en claro tu postura. 


Es simplemente no aceptar cosas que sabes que luego te harán sentir mal. 


No eres responsable de las emociones de nadie. 


Así que, si la gente se enoja porque tú no quieres dejarte manipular, no es problema tuyo.

Comparte:

lunes, 22 de agosto de 2022

El problema de aconsejar a terceros



El problema de aconsejar a terceros

Todos tenemos personas a nuestro alrededor, que amamos y quisiéramos que siempre estuvieran bien. 


Así pues, intentamos por todos los medios darles consejos y si por nosotros fuera, tomar decisiones que les ayuden a vivir en bienestar. 


Y en esto vemos como no todo puede ser felicidad, pues mientras unos se arreglan, otros desbaratan sus vidas. 


Y la pregunta que nos interesa responder es, ¿cómo podemos ayudar a nuestros seres queridos y que nos gana caso? 


Respecto a esto, hace muchos años, tuve una experiencia que te puede ayudar a responder esa pregunta. 


Resulta que en la compañía en la que estaba trabajando, entró a laborar una señorita. 


A unos de mis compañeros le gusto desde el primer día que la vio. 


Y como vi sus negras intenciones, le dije que no era buena idea meterse con la nómina de ninguna empresa. 


Pues tristemente muchos años atrás yo había pasado por una situación similar que me dejó una amarga experiencia. 


Así que, como buen “amigo”, abrí mi gran bocota y aconsejé a mi amigo que no se metiera con esa señorita. 


Dicho y hecho, mi advertencia se la pasó por el forro. 


A los pocos días entabló un noviazgo con ella y como todo al principio, iban de maravilla. 


En realidad, no sé qué ocurrió con la parejita, pero repentinamente se veían discutiendo constantemente. 


Incluso ella llegó a ir con una mano vendada argumentando que su novio la había agarrado mal. 


Sin embargo, en varias oportunidades este amigo me llamaba para que lo acompañara. 


Pues no quería quedarse solo con ella. 


Notaba que ella era muy agresiva con él y hasta lo empujaba disimuladamente en frente mío. 


Y cada uno me colocaba quejas del otro. 


Mejor dicho, ambos me tenían de tampón emocional. 


Yo, por tratar de ser buen “amigo”, me aguantaba este tipo de cosas que me causaban malestar interior. 


Esto ocurre lo quieras o no porque las personas que te importan, si están mal, indefectiblemente te van a afectar. 


Y esta señorita al parecer estaba bastante loca pues su intención era reconquistarlo. 


Me preguntó que si era buena idea llevarle una serenata a su casa. 


Le dije que ni por el berraco se le ocurriera hacer una cosa como esas. 


Que no perdiera su tiempo. 


Que mejor se olvidara de él y bla bla bla... 


Bueno, eso fue como decirle vaya hágalo. 


Derechito fue y contrató a los músicos. 


Al otro día vino llorando, diciéndome que mi amigo la había tratado mal y que dejara de ser tan lambona. 


Allí fue cuando me la volaron y le dije, “si ve mija, eso le pasa por pendeja”. 


Le advertí que eso no era buena idea, pero la niña lo único que quería era hacer su propia voluntad. 


Mejor dicho, la cantaleta que le di, le supo a leche de gallinazo vencida. 


Y desde ese día entendí que las personas cuando tienen problemas y te preguntan algo, no es porque tengan dudas y requieran de tu ayuda. 


Simplemente ellos hace mucho rato tomaron la decisión. 


Y lo único que quieren de ti es una confirmación, para sentirse apoyados. 


Que es la elección correcta. 


Y tal vez en este momento me preguntes, “bueno Gabrielito lindo, ¿entonces cómo se puede ayudar a las personas que amamos?” 


Mira, lamentablemente no existe una forma de ayudar a las personas, interactuando con ellas. 


Lo único que uno puede hacer es darles ejemplo con nuestra propia vida. 


Viviendo bien y en bienestar. 


¿Has notado que si una persona mantiene con amiguitos que todo el tiempo utilizan licor y escuchan música de despecho, esta persona termina haciendo lo mismo? 


¿Y sabías que este mismo efecto ocurre cuando tus amiguitos son personas organizadas, emprendedoras? 


Tú vas a terminar copiando exactamente su ejemplo de emprendimiento. 


Tanto las cosas negativas como las positivas, las estamos copiando y de forma constante de la gente con la que nos relacionamos. 


Así pues, lo mejor que puedes hacer por las personas que te rodean es darles ejemplo de vida. 


Si ellos te ven bien y, sobre todo, te ven rodeado de personas que viven en bienestar, inconscientemente van a copiar tu ejemplo. 


Y quizás nuevamente me estés preguntado, “Gabrielito lindo, ¿qué pasa si un ser querido me pide un consejo?” 


“¿Cómo debo proceder en ese caso?” 


Bueno aprendí de un par de buenas amiguitas a responder “no tengo la mejor idea”. 


“Mire a ver como gestiona eso, pues lo que yo le diga, no le va a servir para su caso”. 


“Haga lo que le diga su corazón”. 


La idea es convertirse en una persona neutra en tus recomendaciones. 


Así, sin miedo, de frente y por el centro. 


Esta es una buena estrategia para que no te utilicen luego de tampón emocional. 


Por mucho que te guste el chisme, no hay nada más aburridor que estar escuchando las quejas de una persona que diciéndole las cosas, haga lo contrario. 


Así que quiero animarte, mediante esta información, a nunca permitir que te incluyan en los errores emocionales de la gente que te rodea. 


No importa si se trata de tus padres, hermanos, etc., pues solo eres responsable por ti mismo y por tus hijos, si aún están pequeños.

Comparte:

lunes, 27 de abril de 2020

La importancia de no apropiarnos de los problemas ajenos



La importancia de no apropiarnos de los problemas ajenos Como hemos visto en temas anteriores, una de las estructuras mentales básicas que tenemos los seres humanos es la empatía.

Esto es lo que nos ha permitido vivir en comunidad ya que nos permite ponernos en los zapatos de los demás.

Lamentablemente, así como nos dejamos llevar del Ego y que nos perjudica constantemente, ocurre lo mismo con nuestra empatía o como aquí le hemos llamado, el Noble.

Y quizás en este momento te preguntes, ¿cómo puede perjudicarnos el ser nobles con los demás y ayudarlo o preocuparnos por su bienestar?

¿No se supone que de eso trata todo esto y es lo que le da sentido a la Vida?

Respecto a esto, hace muchos años mi señor padre, hablando sobre este tema, me hizo una analogía que me ayudó a comprender perfectamente el peligro de todo esto.

Él me decía que en la Vida todos somos como una especie de barco.

Algunos son yates de lujo, otros transatlánticos y así diferentes clases de barcos grandes y pequeños que vendrían siendo los roles que cumplimos en la vida.

Por supuesto los yates de lujo irán rápidamente y ligeros.

Pero hay un grupo que vendrían siendo los buques de carga.

Estos especialmente son el grupo al cual estamos haciendo referencia en este tema, pues son personas que se llenan de cargas con los problemas de los demás.

Recuerda que por naturaleza somos empáticos y vamos a tratar de ayudar a otros que nos importan.

Pero siguiendo con la analogía, sabes ¿qué podría pasar con un buque de carga que está siendo llenado con muchas cosas?

Tiene altas probabilidades de terminar en el fondo con el resto de carga perdida.

Cuando nos llenamos con las cargas o los problemas de los demás, con el tiempo y debido a nuestra empatía, podemos terminar en depresión.

¿Quiere decir esto que debemos volvernos fríos y apáticos con los problemas de las personas que nos importan?

Una cosa es recrearnos con el dolor de nuestros seres queridos y otra cosa muy diferente ayudarlos, si esta en nuestras manos a solucionar sus problemas.

Sin embargo, te voy a contar un secreto que posiblemente no sepas y es que mucha gente sufre, luego se queja, para finalmente buscar recibir un apapacho.

Aunque no lo creas, esto es una necesidad de afecto bastante enfermiza que los seres humanos buscamos.

Para poder entenderlo mejor, intenta recordar como era tu infancia, asumiendo que tuviste un núcleo parental amoroso.

Te consentían, te mimaban y te celebraban todo.

Sin embargo, con el paso del tiempo esto fue cambiando y cada vez esta atención, mimos y cariño fue disminuyendo.

En nuestro sistema nervioso se almacenó esta información, ¿y adivina que estará buscando nuestro cerebro?

Yo le llamo a esto un regreso al útero materno, en donde teníamos todo lo necesario y sobre todo, teníamos la atención de nuestra madre sobre nosotros.

Lamentablemente los seres humanos ingresamos en el ciclo de error, queja y la búsqueda del apapacho para intentar recrear esa sensación de atención y amor por parte de terceros que tanta falta nos hace incluso ahora que somos adultos.

Si realmente quieres ayudar a las personas que amas, intenta tu vivir bien y darles ejemplo de bienestar.

Te aseguro que al verte feliz les darás el premiso de forma inconsciente que necesitan, pues se darán cuenta que si es posible estar bien.

Así que te animo mediante esta información a ayudar a las personas a solucionar y no a entrar en ese ciclo de sufrimiento que está acabando con nuestra paz.

Para finalizar te dejo con la siguiente frase: “Los barcos no se hunden por el agua que los rodea, se hunden por el agua que entra en ellos. No permitas que lo que sucede a tu alrededor se meta dentro de ti y tu hunda.”
Comparte:

lunes, 27 de agosto de 2018

Resolviendo las diferencias con parientes o personas muy cercanas



Resolviendo las diferencias con parientes o personas muy cercanas Todos los niños pequeños tienen sus diferencias entre hermanos. Yo no fui la excepción a esta regla.

Constantemente me peleaba con mi hermano mayor, pero unos minutos más tarde nos volvíamos a encontrar jugando.

Sin embargo, cuando me encontraba estudiando el tercer año de educación básica secundaria, tenía una compañerita con la cual hablaba mucho.

Ella me contó en una oportunidad que había peleado con su hermano mayor y que hace más de siete años no se hablaba con él.

Para mí esto era casi un imposible pues aunque había llegado a tener peleas con mis hermanos, los disgustos nuestros no pasaban más de unos pocos días.

De hecho, creo que la mayor cantidad de tiempo que llegue a estar enojado con uno de mis hermanos fue aproximadamente 7 u 8 días.

Con los años descubrí que mi compañerita de colegio no ha sido la única persona que puede durar tantos años sin hablar con su hermano.

Descubrí que muchas personas, no solo conocidas, sino alrededor del mundo pueden llegar a pasar su vida, sin dirigir una sola palabra a un ser con el cual comparten el mismo origen maternal.

Ya sea unos pocos días y muchos años que nos duren la diferencias con nuestros parientes, hay un patrón común que nos ocurre a todos.

Con esto me refiero al sentimiento de vergüenza por lo que ocurrió y si hacemos un poco al lado nuestro orgullo, nos podemos dar cuenta que extrañamos a esa persona y la relación que teníamos antes de los conflictos.

Si has logrado abandonar el orgullo y has perdonado esa ofensa que te hicieron, quizás en este momento te estés preguntando, cómo podría acercarme a esa persona y reconciliarme?

Con referencia a esto, cuando me disgustaba con mi esposa intentaba ni siquiera mirarla a los ojos o dirigirle la palabra.

Pero siempre que salía de casa, me embargaba un sentimiento vergüenza y no me sentía bien por mi forma de actuar, así yo tuviera la “razón”.

Así como tú te sientes avergonzado por los eventos ocurridos que te llevaron a algún conflicto, y también deseoso de volver a sanar tu relación con esa persona, la otra parte siente exactamente igual.

Y todo esto es debido a la unidad que tenemos con todos, así nos veamos separados y así nos hayan enseñado a pensar egoístamente.

Por ejemplo pregúntate, que hay detrás de tus sueños y miedos? No es acaso encontrar la paz de tu alma? Acaso buscas estar en guerra todo el tiempo? NUNCA.

Yo pienso que más bien todos deseamos vivir en paz y en armonía con otros y nuestro entorno.

Comprendiendo esto de las emociones, es decir que tanto tú como tu “agresor” sienten los mismos deseos de reconciliar y vivir en armonía, viene una pregunta bastante importante.

Para poder plantearla debemos conocer el origen de los conflictos. Los conflictos en realidad se basan en la necesidad de tener la razón.

Por ejemplo todos creemos tener la verdad e intentamos convencer a otros de que nuestra información es la correcta y que los demás están equivocados y debemos llevarlos a la “luz”.

Es por eso que afloran los conflictos pues tu verdad solo te sirve a ti. Mi verdad solo me sirve a mí. Entonces para qué discutir quien de los dos tiene la razón si al final cada uno se ira con sus mismas ideas?

Esta es la razón por la cual se originan los conflictos, que en realidad son peleas de egos por cual es más grande y domina sobre el otro.

Así pues, la pregunta que surge de esto es quieres ser feliz o quieres tener la razón?

A partir de aquí te puede surgir una nueva pregunta y es qué pasa si intento acercarme y esa persona no quiere o me rechaza?

Esta información la llegamos a tocar en un vídeo del año pasado titulado EL PERDON COMO HERRAMIENTA DE INTEGRACION EMOCIONAL.

Como resumen yo traté mal a un gran amigo y este por lógica reacción, se enojó y se distanció. Intenté contactarlo, pero no respondió y le dejé mensajes los cuales ignoró.

Y es coherente su reacción pues yo fui un patán en la forma en que lo traté. Podríamos decir que no merezco su amistad, pero cual era mi problema? Era reconocer mi error y enmendarlo. Esa parte ya la cumplí y quedé libre. Ya el problema viene siendo siempre del que queda atado con sus emociones.

Así que te animo mediante esta información a no permitir que la duda o el miedo te hagan seguir atado a emociones destructivas como la culpa, vergüenza y dolor.

En cualquier momento e incluso este instante puedes decidir ser libre de eso y actuar de diferente forma. Siempre ten presente si quieres ser feliz o quieres tener la razón. De esto depende que vivas en bienestar o en malestar.

No esperes a que la vida se pase y que termine para al final arrepentirte de no haber actuado y perdido el tiempo con esa persona que tanto anhelas tener a tu lado. Recuerda que tu problema es vivir en paz, y los demás pueden elegir lo mismo o seguir siendo esclavos de sus emociones.
Comparte:

lunes, 6 de agosto de 2018

Cómo tratar con familiares o personas tóxicas



Cómo tratar con familiares o personas tóxicas Hace algunos días me di a la tarea de realizar una pequeña encuesta donde realicé dos preguntas. La primera era “cuál es la definición que entiendes por persona tóxica?” y la segunda “tienes a tu alrededor personas tóxicas?”

Para hacer un resumen de los datos de esta encuesta, una persona tóxica es mala gente, negativa y envidiosa. En otras palabras todo un angelito que nunca deseamos toparnos con él/ella.

Lamentablemente la segunda pregunta confirma que las personas tóxicas no están solo en literatura o en la vida de otras personas, sino que están más cerca de lo que pensamos.

Oficialmente, una persona tóxica se define como alguien que de forma sistemática busca perturbar a un objetivo e impedir su bienestar. Sin embargo los profesionales en psicología no avalan un 100% esta definición, pues esto puede aceptar muchas interpretaciones y marcos de referencia.

Este término en realidad no es nuevo en su definición. Años atrás se le llegó a conocer con el término de hiperactivo. Y también se le llegó a conocer por variados nombres, pero a la final es mismo principio de personas que no deseamos en nuestro camino.

Este término en la actualidad está siendo sobre-utilizado y más bien hacemos referencia a este cuando chocamos con una persona que posiblemente no haga lo que nosotros deseamos.

Es por esta razón que vemos constantemente personas cercanas quejándose o manifestando indirectas en redes sociales por la toxicidad de algunos que quieren robarle su paz y felicidad.

En otras palabras tóxico es todo aquel cercano a mí con el que no estoy de acuerdo.

Respecto a esto hemos escuchado que debemos apartarnos lo máximo posible de dichas personas tóxicas, pero qué ocurre cuando una de esas personas es un pariente cercano?

Bueno, teniendo en cuenta la sobre-utilización del término y como lo aplicamos a aquellos que están en contra de nuestra voluntad, debemos plantearnos seriamente, “no será en realidad que nosotros somos los tóxicos para ellos?”.

Por lo general, para no hacer referencia al 100% de las veces y respetando el precepto que toda regla tiene una excepción, los problemas o choques personales que tenemos con parientes se deben a que intentamos cambiar o manejar sus vidas según lo que nosotros consideramos correcto.

Desde que llegamos al mundo hemos aprendido que es muy encomiable ayudar a otros y sobre todo a nuestros parientes.

Sin embargo hay una gran diferencia entre ayudar a un pariente e intentar cambiar su comportamiento “por su bien”.

De hecho esto representa una delgada línea entre el amor que despertemos en ellos o el desprecio que recibiremos por meternos en sus vidas.

Debemos comenzar a analizar nuestras vidas para detectar que no somos tóxicos para otras personas con nuestra intención de “ayudarles”.

Durante estos años he aprendido que la mejor forma de ayudar a las personas que amas es mediante tu ejemplo de vivir en bienestar.

Cuando haces esto, automáticamente les da permiso al inconsciente de estas personas para que sigan tu camino, ya que se darán cuenta que se puede vivir con calidad.

Pero qué debemos hacer cuando nos somos los tóxicos sino que esa persona cercana que amamos los es para nosotros?

En uno de los principales textos sagrados de la humanidad podemos leer la frase “ama a tus enemigos, pues qué merito tiene responder con amor a los que te aman?”.

Hasta hace algunos años creía firmemente que uno debía responder de la misma forma como te tratan. Al que da amor, se le responde con amor y al que da odio, de la misma forma.

Sin embargo, toda la crisis que viví en el pasado me hizo entender que esa misma persona que tanto desprecias es exactamente igual a ti. Con los mismo miedos, culpas, anhelos, frustraciones, etc.

Personalmente he conocido gente que podríamos llamar tóxica, prepotente, envidiosa, etc. y descubrí que al no entrar en su juego de respuesta, según como recibía, pronto me gané el respeto y la confianza de dichas personas.

Al conocerlos a fondo me di cuenta que estaban llenos de miedos e inseguridades que los llevaban a actuar con prejuicio sobre mí. Y lo más importante crecí mucho interiormente porque aprendí cosas que no podía ver por discriminarlos de la misma manera.

Para esto tuve que emplear el carisma, del cual hablé el vídeo anterior sobre este tema.

No existe ninguna virtud en responder a tus emociones de ira o desprecio hacia las personas dejándoles enviando indirectas en redes sociales. Eso lo hace cualquiera.

Solo los poderosos son capaces de controlar sus emociones y expresar su amor a aquellos que los rodean, sin importar la respuesta que reciban de estos.

De hecho así trabaja la Vida, Dios o como prefieras llamarle. Simplemente da con abundancia y amor sin esperar nada a cambio.

Así que te animo mediante esta información a abandonar los pre-juicios personales que tengas hacia la gente que amas y que consideras tóxica, pues podrían ser estos los que en un futuro te ayudaran a dar un paso más hacia el cumplimiento de tus metas.
Comparte:

Comprar PBA

Compra BPA

Contáctame

Nombre

Correo electrónico *

Mensaje *

Donaciones

Acerca de mí

Mi foto
Ingeniero de Sistemas e Investigador del Pensamiento Humano y las emociones, y como estas influyen en las decisiones que tomamos cada segundo para tener éxito o fracaso.

Notificaciones Telegram

Telegram
Canal Ingeniero Gabriel Salazar / AUTOPODER Recupera tu Poder Interior

Para recibir el vídeo de cada lunes en tu Telegram:

Ingresa a:
t.me/autopoder1
t.me/IngenieroGabrielSalazar
Grupo Telegram:
t.me/+Z7ZMi8tw4WdjYTcx

Vídeo Bienvenida

YouTube

Copyright © Ritmo Positivo 2009 - 2024. Con tecnología de Blogger.