Retoma el control de tu vida. Estrategias efectivas para el control emocional

Mostrando las entradas con la etiqueta empleo. Mostrar todas las entradas
Mostrando las entradas con la etiqueta empleo. Mostrar todas las entradas

lunes, 6 de mayo de 2024

¿Éxito o Fracaso? La Verdad que se Oculta detrás de las Apariencias Laborales



¿Éxito o Fracaso? La Verdad que se Oculta detrás de las Apariencias Laborales

Uno de los mayores temores que tiene una persona que ha terminado sus estudios y se dispone a caminar por la vida laboral es tener éxito en eso que eligió profesión. 


Lamentablemente, tenemos problemas con esa palabra éxito, pues la mayoría relacionamos esto con el éxito financiero. 


Es decir que, si estudiaste para ser veterinario y no tienes los multi millones que otro veterinario tiene, entonces has fracasado. 


Y peor aún, más cruel es haber estudiado esa carrera y terminar por ejemplo trabajando en otra cosa. 


Por ejemplo, conozco de primera mano, el caso de una persona que fue 10 de 10 durante toda su etapa como estudiante. 


Incluso desde sus primeros años en el jardín infantil, esta personita resaltaba por sus capacidades. 


Todo el mundo tenía altas expectativas sobre esta persona. 


Pero cuando llego el momento de enfrentarse a la vida laboral, ¿adivina que ocurrió? 


Bueno, digamos que se pifió y terminó trabajando en un humilde puesto de una importante compañía. 


Haciendo cosas que no tienen nada que ver con su profesión. 


Las personas a su alrededor dicen que ha fracasado. 


¿Pero en realidad podemos llamarlo así? 


¿Cómo podemos definir el éxito o fracaso? 


Bueno, esto fue una pregunta que me hice hace mucho tiempo cuando mi hija Isabellita venía en camino. 


Recuerdo que cuando la mamá tuvo su primera ecografía, yo avisé en la empresa para la cual trabajaba y unos compañeros decidieron asistir conmigo a esa cita. 


Cuando nos bajamos del auto, se me vino a la mente, que pasaría si dentro de algunos años, Isabellita me preguntara si yo era feliz en mi trabajo. 


¿Qué le respondería? 


Obviamente sentiría vergüenza de responder afirmativamente a esa pregunta pues yo no era feliz en ese trabajo. 


Y eso que no era un “mal” trabajo, pues yo ganaba muy bien. 


Así que, a partir de ese momento, y no tenía la menor idea de cómo hacerlo, iba a trabajar en aquello que a mí me apasionaba que era escribir código para desarrollar aplicaciones. 


Unos meses después conseguí ese trabajo soñado. 


Pero antes de conseguirlo, también me propuse a hacer eso que me tocaba de la forma más placentera posible. 


Allí me di cuenta de que comencé a disfrutar de ese trabajo que no me gustaba. 


Y lo comencé a hacer tan bien que hasta me aumentaron el sueldo. 


Finalmente me fui y hasta hoy, después de muchos eventos aún me siento feliz trabajando en eso que tanto me apasiona. 


Podemos concluir de esta historia que por muy bien que ganes, sino eres feliz o no te apasiona eso que haces, eres un fracasado. 


Hace muchos años conocí a un joven que me contó que trabajaba en algo que no le gustaba pero que ganaba muy bien. 


Y adivina como era su vida. 


Retomando el primer ejemplo que la persona de mi entorno, el fracaso de ella no es por haber sido una excelente estudiante y terminar trabajando en un humilde puesto. 


Su fracaso es que NO disfruta ese humilde puesto que le “tocó”. 


Cuando uno disfruta lo que hace, no solo deja de trabajar, sino que su entorno comienza a cambiar y el resto de las cosas, como el dinero, vienen por añadidura. 


Siempre que salgo a las 5am a realizar deporte, me encuentro a personas cabizbajas, con estrés, preocupación, miedo o cualquier otra emoción negativa, yendo a sus trabajos. 


Por mucho dinero que gane una persona, ¿crees que bajo esas condiciones tendrá éxito en la vida laboral? 


Recuerdas que me cuestionaba, ¿qué le diría a mi hija cuando me preguntara si yo era feliz en mi trabajo? 


Curiosamente hace algunos días no me lo preguntó, sino que me lo afirmó. 


Así que quiero animarte, mediante esta información a que comiences a evaluar si estás feliz con los resultados de tu vida. 


Si la respuesta es negativa, comienza a disfrutar de eso que realizas cada día. 


Puedes usar tu imaginación, pensando que estás en una película, haciendo una misión importante o cualquier cosa que a ti se te ocurra. 


Te aseguro que cuando encuentres placer en eso que haces, dejarás de trabajar.

Comparte:

lunes, 13 de febrero de 2023

El problema de las oportunidades perdidas



El problema de las oportunidades perdidas

Yo creo que una de las cosas que más escucha Dios de parte de nosotros, no son las gracias, sino nuestras peticiones y ruegos para que las cosas nos salgan como las queremos. 


Me lo imagino colocándose la mano en la frente y diciendo “huy no, allí está de nuevo esa cansona o ese cansón con sus caprichos”. 


Pero hablando en serio, todos le pedimos constantemente a la Vida que tengamos un buen trabajo, una excelente salud, y muchos otros por supuesto tener a su amorcito al lado. 


El problema es que muchas veces, eso que pedimos no es lo que esperamos y allí es donde pecamos con nuestra ingratitud. 


Para que me puedas entender un poco mejor, hace algunos días, mi nutricionista (a la cual le mando un abrazo si me está viendo), me contó una historia sobre una sobrina de ella que pasó muchos años preparándose profesionalmente. 


Finalmente, cuando llegó la hora de conseguir un empleo, ninguno le servía porque no estaban acorde a su nuevo estatus de profesional. 


Tristemente en su casa, llegó una temporada donde comenzaron a experimentar bastantes dificultades económicas. 


Y al parecer muchas veces sólo podían comer 1 vez en el día. 


Bueno esta señorita en ese periodo se daba el “lujo” de no aceptar trabajos, porque no estaban acorde a sus capacidades como profesional 


Y así siguió pasando el tiempo, que aproximadamente fueron unos 3 años. 


Por decir algo, si en un trabajo le ofrecían unos mil dólares mensuales, ella lo rechazaba pues según sus capacidades merecía 5 mil dólares como mínimo. 


Al final cuando estaba “mordiendo cable” (como se dice en mi país), tuvo que aceptar un trabajo de 500 dólares para poder ayudar con los gastos básicos de supervivencia en casa. 


Y mira que cuantas veces esta señorita no le llegó a pedir a Dios que le ayudara a conseguir un trabajo. 


Lamentablemente esas ayudas que la Vida le enviaba, a ella no le eran suficientes, pues esperaba siempre lo mejor. 


Sus parientes siempre le decían: “toma ese trabajo, a lo mejor por allí te das a conocer y comienzas a avanzar hasta ganar lo que esperas”. 


No había poder humano ni celestial que le iluminara la mente a esta señorita. 


Y todo porque su ego, que nos ayuda a avanzar, pero que también nos mete la pata, le “dictaba” que no aceptara migajas en su vida. 


¿Quiere decir esta experiencia que debemos ser conformistas con las oportunidades pues quizás este es nuestro camino? 


No necesariamente. 


Por ejemplo, en mi caso, cuando yo me encontraba “mordiendo cable” tuve muchas oportunidades para ir a ganarme un salario mínimo. 


Tuve una situación similar a la de la señorita del ejemplo donde las personas a mi alrededor me decían: “Gabrielito vaya y tome eso, aunque sea”. 


Pero en mi caso ocurría algo bien curioso. 


Es como si una voz desde mi interior y en forma de sentimiento de amor me decía: “Nuuuu Gabrielito, no haga eso porque allí te vas a quedar por siempre, ganando ese valor”. 


Y adicionalmente “me decía” que siguiera como iba a pesar que aún no viera la luz al final del túnel. 


Lo extraño de eso es que la voz del ego siempre va acompañada de un sentimiento de conflicto. 


En mi caso era un sentimiento de mucho amor y paz, como si mi interior me estuviera diciendo “confía que todo va a salir bien”. 


Bueno, Gabrielito lindo decidió confiar y no dejarse llevar por el miedo o desespero y el tiempo me confirmó que ese fue el camino correcto pues logré salir de esa mala racha en la que estaba. 


Por eso siempre reconozco que, si fuera por mí, todavía estaría mordiendo cable. 


Definitivamente algo superior me ayudó y me sacó de todo eso. 


Y tal vez me preguntes, “bueno Gabrielito lindo, entonces ¿qué debo hacer si me encuentro en esa situación para no dejar perder oportunidades?”. 


Aquí es donde entra tu sabiduría. 


Y esto es algo que le aprendí hace muchos años a un socio de negocios que tuve. 


Él decía constantemente que a Dios no se le deben pedir riquezas, sino sabiduría. 


La intuición en las oportunidades es muy importante. 


Hay que aprender a escuchar las emociones, pues como dice el libro Conversaciones con Dios, el sentimiento es el lenguaje del alma. 


Si tienes que tomar una decisión, enfócate más bien en cómo te hace sentir si tomas un camino o el otro. 


Si tu sentimiento es de alegría, verdad y amor, ten por seguro que ese es el camino que la Vida tiene para ti.

Comparte:

lunes, 16 de diciembre de 2019

Cuál es el sentido del trabajo



Cuál es el sentido del trabajo Desde muy pequeños, a la mayoría se nos enseña que el trabajo para el ser humano es una especie de castigo.

Si tomamos de referencia uno de los textos sagrados de la humanidad, se nos dice que, en el principio, el ser humano lo tenía todo.

Una vez que la raza humana se equivocó en dicho principio, se narra que se le dejó de suministrar todo y a partir de ese momento tenía que ganarse la vida por su propio esfuerzo.

He conocido personas que dicen que esto es una metáfora para explicar algo. Otros por el contrario lo consideran literal.

Sin embargo, sea cual se su significado, es un hecho que este ha sido un concepto bastante influyente en que veamos el trabajo como una especie de castigo.

Esto lo puedo ver a diario cuando salgo a realizar ejercicio en las madrugadas.

Por ejemplo, si está lloviendo, la gente tiene una expresión facial bastante fatalista.

Y así no esté lloviendo, ¿adivina cuál es su expresión y sobre todo actitud mientras van camino a sus trabajos?

Puedes comprobarlo por ti mismo, por ejemplo, mirando tu propia actitud al trabajar.

O también observando a otros cuando vas camino a tu trabajo.

Verás que muy poca gente sonríe.

Y esto es tan contagioso que hasta los estudiantes en el transporte público toman la misma actitud de amargura y derrotismo.

A pesar de esto, hace bastantes años conocí a un joven que, aunque no le gustaba su trabajo, lo hacía con mucha dedicación porque le permitía ganar buen dinero.

Y esto hace que nos cuestionemos, si nunca hubiéramos tenido el concepto del trabajo como un castigo, ¿realmente cuál es el objetivo de este?

¿Es el de simplemente ganar dinero o sentir la plenitud de servir a otros?

Cuando estamos en necesidad, es decir en el modo supervivencia, a esta pregunta anterior sin dudarlo diríamos que el objetivo del trabajo es ganar dinero.

Pero cuando ya hemos pasado esa etapa de llenar nuestras necesidades, tanto físicas como emocionales, este concepto del dinero comienza a cambiar y comenzamos a pensar en ayudar a los demás.

¿Has notado quienes son los grandes filántropos de la humanidad?

Por lo general son personas que ya han trascendido de su modo supervivencia.

Y puede que en este momento me digas que eso es una farsa, pues muchos lo hacen porque quieren deducir impuestos.

O que quizás tras su máscara de bondad tienen otras intenciones muy poco honorables.

Es por eso que anteriormente hago énfasis en los filántropos que ya dejaron su modo supervivencia.

Adicionalmente no podemos afirmar lo mismo que otros han repetido al respecto de este tema.

Lamentablemente no convivimos con esas personas que acusamos y no tenemos las pruebas necesarias, salvo nuestra imaginación calenturienta.

Con esto no quiero decir que hay personas que solo tienen dinero, y han llenado una parte de sus necesidades.

Muchos siguen teniendo hambre en su alma y esto es lo que los mantiene cautivos en la pobreza y por lo tanto siguen ambicionando tener más pase lo que tenga que pasar.

Recuerda que, en este mundo, así como hay personas malas, también existen personas muy buenas.

Te puedo decir que he conocido de ambos bandos y al menos en mi entorno existen por partes iguales.

En conclusión, podemos decir que el trabajo tiene dos sentidos y el primero es salir de nuestro modo supervivencia.

Una vez que abandonamos este modo, el sentido final es el servicio hacia los demás.

Increíblemente cuando realizas tu trabajo con el fin de servir a los demás, es cuando todo comienza a fluir en tu vida.

Con esto me refiero al ámbito de llenar tus necesidades y al mismo tiempo recibir la satisfacción del servicio a otros.

Así que te animo mediante esta información a que salgas de tu estado de necesidad, solucionando las necesidades de los demás.

La verdad esto no es tarea fácil, pero cuando lo logras no solo llenarás tus bolsillos, sino también tu mente y corazón.
Comparte:

lunes, 30 de octubre de 2017

Encontrando tu verdadero propósito en la vida


Encontrando tu verdadero propósito en la vida

Todos hemos conocido personas que disfrutan lo que hacen, mientras nosotros los observamos y con amargura deseamos vivir sus vidas. Con esto me refiero a la profesión que realizan. Y la realizan tan bien que parece que fuera algo fácil.

Respecto a esto hace algunos años me di a la tarea de realizar una investigación con algunas personas que me encontraba en el trabajo, en el trayecto hacia algún lado o en lugares donde hacia deporte.

A este gran grupo de personas cuando les pregunté porque estaban trabajando en eso que realizaban, me decían “porque no tengo dinero para dedicarme a otra cosa” o “porque pensé que eso me daría una mejor opción económica”.

Pero la pregunta más importante que les hice fue “¿eres feliz con lo que haces?”, fue respondida con un unánime “definitivamente soy infeliz en mi trabajo”. La respuesta a la siguiente pregunta “¿por qué no haces algo diferente?”, obtuvo más resultados como por ejemplo “tengo miedo”, “ya estoy muy viejo para cambiar”, “no puedo perder el tiempo y dinero invertidos anteriormente”, por mencionar algunas.

Años atrás en mi caso ocurría algo similar. No estaba contento con lo que hacía y sentía amargura porque no era lo que me esperaba de la vida. Esto hizo que no solo sintiera malestar por mi trabajo, sino por la gente con la que trabajaba. Tiempo después, cuando estaba en el último semestre de ingeniería conocí a una persona bastante inteligente, que al igual que a mí nos apasionaban dos cosas, la ingeniería de sistemas y la influencia de las emociones humanas en las decisiones que tomamos cada segundo.

Este compañero de clases vivía una vida de aparente calma y felicidad. Trabajaba pocas horas en el día y disfrutaba tanto su trabajo que se veía fácil. Debido a esto me sentí animado a contarle mi caso y expresarle como me sentía. La verdad pensé que me diría algo como ve a tal sitio y di que vas recomendado por mí que allí te espera un nuevo trabajo feliz.

Simplemente me dijo “Gabriel, ¿usted está aburrido con su situación, quiere cambiar de trabajo? Entonces tome la decisión y póngase en acción!”. Honestamente yo pensé “este man cree que mi vida es fácil. Claro como él ya la tiene resuelta es muy fácil decir eso”.

Me fui a casa triste pero pensando mucho en eso. Durante días lo pensé, hasta que finalmente lo comprendí. Realmente tenía que tomar la decisión de dejar de hacer mi trabajo y cambiar por uno que sí me gustara. Entonces me pregunté eso, “quiero cambiar?” cuando finalmente, cosa que duro varios días, decidí que ya no quería trabajar haciendo eso que “me tocaba”, entonces comencé a buscar empleo en otras partes.

Fueron pasando los días y no conseguí ningún empleo nuevo y feliz, pero en vez de desesperarme decidí esta vez hacer algo diferente y era que mientras llegaba esa nueva oportunidad el trabajo que estaba haciendo lo iba a realizar con mucho amor y dedicación.

Entonces me comencé a levantar más temprano, a hacer las tareas del día con amor y pasión como si ya estuviera en mi nuevo trabajo feliz. En otras palabras, tomé la actitud de realizar un entrenamiento para lo que sería mi nueva vida laboral.

Fue tal el impacto que en pocas semanas mis compañeros notaron el cambio y me decían en broma que ahora caminaba y podía ver los colores y escuchar los pájaros, pues sabían de mi amargura e infelicidad anterior. Y no solo fue eso, sino que las cosas mejoraron tanto que a todos nos hicieron un incremento salarial.

Algunos meses después, si llegó la nueva oportunidad, pero para ser fiel a mi decisión de irme, finalmente la tomé. Con el tiempo me di cuenta que uno vive las cosas porque no se quiere desprender de ellas, es decir prefiere seguir sufriendo y como puedes observar en las respuesta iniciales a la pregunta, “¿por qué no cambias, si eso te hace daño o no te gusta?” simplemente vamos sacando excusas como el miedo, me tocó, no hay más, etc. pero en realidad no tomamos acción porque no hemos decidido si realmente queremos cambiar.

Pero voy a hacerte muy honesto, tampoco tomamos la decisión porque constantemente metemos mala información en nuestra cabeza, o información que nos apoya poco o nada tales como noticias, chimes, entretenimiento de baja calidad, etc.

A nuestro conocidísimo amigo el doctor Albert Einstein, se le atribuye la frase: “Locura es hacer lo mismo una y otra vez esperando obtener resultados diferentes”. Si realmente deseas cambiar toma la decisión y ponte en acción, pero para tener la suficiente fuerzas de tomar la decisión cambia primero la información que ingresas a diario a tu vida. Apóyate en información diferente, así que te animo a que visites la página del doctor Giordani en Auto Poder para que comiences a cambiar tu vida hoy mismo. De lo contrario no te quejes de la vida que tienes o que no puedes cambiarla.

Tienes en tus manos el control de tu vida, pero las cosas no van a cambiar por si solas. Lamentablemente hemos sido influenciados desde niños que después de sufrir vendrá el Hada madrina con su varita a solucionarnos todos los problemas, o el angelito con traje y la maleta con el millón de dólares, o peor aún, si sufres ahora, “en la otra vida” recibirás una recompensa por dicho sufrimiento.

Así que te animo a cambiar tu información diaria para que vivas una vida de bienestar y no una vida de amargura y soledad, frustración y desilusión.
Comparte:

Comprar PBA

Compra BPA

Contáctame

Nombre

Correo electrónico *

Mensaje *

Donaciones

Acerca de mí

Mi foto
Ingeniero de Sistemas e Investigador del Pensamiento Humano y las emociones, y como estas influyen en las decisiones que tomamos cada segundo para tener éxito o fracaso.

Notificaciones Telegram

Telegram
Canal Ingeniero Gabriel Salazar / AUTOPODER Recupera tu Poder Interior

Para recibir el vídeo de cada lunes en tu Telegram:

Ingresa a:
t.me/autopoder1
t.me/IngenieroGabrielSalazar
Grupo Telegram:
t.me/+Z7ZMi8tw4WdjYTcx

Vídeo Bienvenida

YouTube

Copyright © Ritmo Positivo 2009 - 2025. Con tecnología de Blogger.