Retoma el control de tu vida. Estrategias efectivas para el control emocional

Mostrando las entradas con la etiqueta desconfianza. Mostrar todas las entradas
Mostrando las entradas con la etiqueta desconfianza. Mostrar todas las entradas

lunes, 9 de septiembre de 2024

El Sesgo de Confirmación: Cuando Pedir Consejo es Buscar Validación



El Sesgo de Confirmación: Cuando Pedir Consejo es Buscar Validación

Muchas veces tenemos personas a nuestro alrededor que nos piden algún consejo, debido a problemas que tienen. 


Lamentablemente muchas de estas personas en realidad no buscan un consejo, sino una confirmación de lo que hace mucho rato han pensado hacer. 


Esto es lo que se conoce como sesgo de confirmación. 


Que es cuando una persona busca, interpreta o recuerda información de manera que confirme sus creencias o deseos previos. 


Aunque en este caso, la persona que pide consejo, lo que realmente está buscando es que alguien valide lo que ya ha decidido o lo que quiere hacer. 


En lugar de considerar objetivamente todas las opciones o recomendaciones. 


Por ejemplo, hace ya varios años conocí un paciente en el gimnasio donde asistía. 


Este personaje cada vez que lo saludaba me respondía: “aquí peleando con los hierros para no pelear con la mujer”. 


Bueno una vez me contó que había trabajado con la fuerza pública de este país y que estaba casado con una señorita bastante joven. 


Fue allí cuando entendí su extraña forma de responder mi saludo en las mañanas. 


Me preguntó en que trabajaba yo y le conté que me pagaban por divertirme escribiendo algoritmos. 


Y días después se me acercó tímidamente a preguntarme que, ya que yo trabajaba en tecnología, si era posible acceder al teléfono de una persona para ver sus conversaciones. 


Yo le dije que técnicamente eso es posible pero que legalmente no. 


Es un delito violar la privacidad de las personas obteniendo datos sin su consentimiento. 


Así que le pregunté por qué no les pedía ayuda a sus compañeros de la policía ya que él había tenido un puesto directivo. 


Y me dijo que sólo se podía mediante una orden de un juez. 


Le respondí: “¿ves? Si no lo pueden hacer tus compañeros, un civil se puede meter en graves problemas”. 


Le dije que, si sospechaba de alguna infidelidad, existían muchas probabilidades que eso fuera cierto. 


Desafortunadamente o quizás afortunadamente la gente que te rodea tiene unos patrones de comportamiento que vamos aprendiendo cada día. 


Así pues, cuando la persona está pasando por algo, estos comportamientos suelen cambiar. 


Y esto es lo que nos indica que algo no está bien. 


Teniendo en cuenta esto, le dije: “¿por qué no hablas mejor con ella y le preguntas?”. 


Dile todo lo que piensas y es muy probable que las cosas se aclaren. 


Bueno este paciente habló con su joven esposa y en medio del llanto le confesó lo que efectivamente él estaba sospechando. 


Le dijo que era culpa de él por haberla descuidado y bla bla. 


Bueno, para hacerte un resumen este muchacho me contó que se sentía muy bien por haber aclarado las cosas con ella. 


Pero con los meses una noche me llamó a pedirme un favor. 


Que, si yo podía ir a un bar a tomarme una cerveza y ver que hacía su esposa, pues ella estaba trabajando allí. 


Le dije que yo no hacia ese tipo de cosas porque no me gusta meterme en la vida de los demás. 


Y que si estaba desconfiando era mejor que se retirara con dignidad. 


Pues cuando no confías en alguien, ¿qué razón tienes para seguir con ella? 


Al tiempo me contó que se separó y que solo tenía contacto con sus hijas. 


Bueno, resulta que ayer me lo encontré en el supermercado y con mucho orgullo me presentó a su esposa. 


Esto claramente fue una muestra de lo que es un sesgo de confirmación. 


Este muchacho en diferentes oportunidades me preguntaba siempre lo mismo. 


Y era, ¿cómo solucionar su relación de pareja? 


Honestamente uno quisiera ayudar a las personas, con algún consejo. 


Lamentablemente la persona ya tiene definido que hacer. 


Así que lo único que está buscando en tus palabras es una confirmación para realizarlo. 


Es por eso por lo que quiero animarte mediante esta información a no estar de capitán salvador de la humanidad. 


Si una persona viene por tu ayuda, pero notas que hace cualquier cosa, menos tu recomendación, no pierdas más tu tiempo. 


Hay personas que nos importan y nos duele lo que les pase. 


Lamentablemente lo único que podemos hacer por ellos en echarles la señal de la cruz y que sea lo que Dios quiera.

Comparte:

lunes, 10 de junio de 2024

¿Confías Demasiado? Descubre Cómo Ser Astuto sin Perder tu Fe en la Gente



¿Confías Demasiado? Descubre Cómo Ser Astuto sin Perder tu Fe en la Gente

Una de las preguntas que más suele pasar por nuestra mente es si debemos confiar o desconfiar de las personas que nos rodean. 


En teoría nuestros pensamientos y creencias dar forma a nuestra realidad. 


Y, por lo tanto, si somos constantemente desconfiados, es muy probable que estemos “atrayendo” personas que nos quieran estafar para cumplir con esta ley. 


Bueno, lamentablemente no todos los casos son iguales y NUNCA debemos irnos a los extremos. 


Recuerdo que hace muchos años cuando me dieron mi primer vehículo, un vecino me dijo que la confianza mata. 


Y esto era porque uno se acostumbraba que los frenos funcionaban cada vez que uno presionaba el pedal. 


O que la dirección estaba bien, pues en todo momento el vehículo respondía a su mando. 


Así pues, con el paso del tiempo nos sentíamos tan confiados que comenzábamos a abusar de la velocidad. 


Y era en el momento menos esperado cuando el vehículo podría tener una falla mecánica y nosotros accidentarnos. 


O peor, hacer accidentar a alguien más o cositas peores que pueden llegar a pasar. 


Y quizás en este momento me preguntes: “bueno esto es respecto a las cosas, ¿y con referencia a las personas?”. 


Bueno, hace algunos días un buen amigo estaba de viaje en una ciudad muy lejana de mi localidad. 


Estando allá se “enamoró” de 2 motocicletas, las cuales decidió comprar una para su hijo y otra para él. 


La de su hijo se la llevaron el mismo día a su casa. 


Pero la de él que era mucho más grande y costosa no se la entregaron. 


Lamentablemente la transacción la hizo un sábado y esta se vería reflejada en la cuenta del vendedor hasta el próximo martes (el lunes era día feriado). 


Este amigo es bastante confiado y simplemente le dijo al otro que volvía por la motocicleta cuando le confirmara la transacción. 


Cuando él me contó esto, yo no quise “mufarlo”, así que le pregunté que si todo estaría bien y me dijo: “pues el verá si me roba”. 


A mí me dio risa su comentario y afortunadamente este paciente tiene mucho dinero. 


Bueno, la buena noticia es que la transferencia se hizo efectiva. 


Y la mala es que mi amigo ya no para en su casa por estar estrenando su nueva motocicleta. 


Afortunadamente, el comprador fue una persona honesta y lo llamó inmediatamente se vio reflejada la transferencia del dinero en su cuenta. 


Mira, tristemente aquí hubo una excepción a la regla. 


El ser humano moderno se le acabó el honor. 


La mayoría solo están pensando en sacar provecho. 


Y si realmente quieres vivir en bienestar no puedes andar de confiado por el mundo esperando que todos sean como tú, honestos, transparentes y hasta “traslucidos”. 


Como dice uno de los textos sagrados de la humanidad: “Sean mansos como palomas, pero ASTUTOS como serpientes”. 


No debes irte al extremo de pensar que todos te quieren estafar. 


Pero tampoco vale la pena ganarse un malestar por confiado. 


No hay estilla que talle más en tu mente que el pensamiento de que por confiado, has sido víctima de una estafa.

Comparte:

lunes, 21 de marzo de 2022

El problema de la desconfianza con la Vida



El problema de la desconfianza con la Vida

Decía el finado científico Albert Einstein que la decisión más importante que tomamos es si creemos que vivimos en un universo amistoso u hostil. 


Y esta decisión es algo que se toma cada día y en cada instante, en cualquier cosa que hacemos. 


No es lo mismo levantarte de madrugada, abandonar el calor de la cama e incluso con mucho sueño para hacer tus labores y ganarte el sustento. 


A levantarte con mucho entusiasmo pensando que este día va a ser mucho mejor que el anterior, donde tendrás la oportunidad con tu trabajo de ayudar a las personas. 


En el primer caso, esa actitud no generará la energía para cumplir tus objetivos. 


En el segundo el evidente que no importa como sea el día de esa persona, algo va a cambiar en su destino. 


A pesar de estos puntos de vista diferentes, las personas tienen algo en común y es la creencia en un poder superior. 


Y aquí puede que me digas “Gabrielito lindo, allí si estás completamente equivocado porque yo no soy creyente en nada.” 


Mira, independiente del concepto que tengas sobre esos temas tan polémicos, tú siempre creerás que hay algo más grande que tú. 


No importa el nombre que le des, ya sea Universo, Vida (como en mi caso), Dios, Ángeles. 


Divina Providencia, el Futuro, las estrellas, tú mismo o lo que sea. 


Siempre acudimos a ese algo especial cuando estamos en problemas. 


A nivel general todo el mundo habla de Dios o “mi Diosito” como se escucha popularmente. 


La mayoría de personas gritan a los 4 vientos que sin él no son nada, que los bendice más que el resto de los mortales, y bla bla bla. 


Pero un pequeñísimo porcentaje de esas personas, realmente colocan su confianza en ese poder superior. 


Lo acabamos de ver en el año de “los Gemelos”, con el visitante que nos llegó de “improviso”. 


Espero que me estés entendiendo porque hay temas que en estos medios está prohibido tratar porque te llevan a la hoguera. 


El punto fue que lo primero que les dieron como solución, la gente salió corriendo y en fila para “salvarse”. 


Y sin tener la certeza de que benditos rayos trae eso. 


O como puede afectar mi vida en el futuro, etc. 


A punta de fe ciega, con absoluta obediencia y sin cuestionar las posibles de las intenciones de terceros. 


Y la pregunta interesante de esta situación es, ¿bueno y entonces ese Diosito sirvió de adorno? 


Porque yo no vi a ninguno o al menos muy pocos decir “mi Diosito me va a proteger”. 


De hecho, una vez hablando con un señor que me transportó, sobre estos temas, me dijo que él, por necesidad nunca se quedó en casa, sino que tenía que salir a trabajar. 


Todos los días hasta la fecha se encomendaba a su Diosito para protección y que le iba muy bien. 


Mira, tal vez no te va a gustar lo que vas a escuchar de mi linda boquita, pero a la gente ese Diosito no le sirve ni para un C. 


Sirven más las tetillas en los hombres. 


Si yo mantengo predicándole a los demás de mi Diosito, es porque tengo plena confianza en él y no en las primeras palabras de otro igual que yo o hasta peor. 


Mira la vida te quiere dar lo que pides, pero tu actitud debe soportar tus palabras. 


Una cosa es decir quiero esto o voy a hacer esto, y otra la actitud con la que encaras los desafíos para lograrlo. 


Respecto a esto, hace menos de una semana me encontraba de trasteo. 


Asumo que ya te habrá tocado y no hay cosa más aburridora y cansona que trastear tus cosas para otro sitio. 


Y eso que no tengo muchos porque me gusta el estilo minimalista. 


Por mi yo sólo tendría una cama, mi cepillo de dientes y un vaso para tomar agua. 


El caso es que en mi imaginación calenturienta yo dije “nuuuuuu, yo ese paseo no me lo hecho al hombro nunca”. 


Me fui al centro de mi localidad y contraté a dos ayudantes, con los cuales acordé iniciar a las 3 de la tarde. 


Bueno esos berracos nunca aparecieron y el camión de la mudanza ya estaba parqueado y listo. 


Lo primero que pensé fue en las 2 opciones que tenía. 


Ponerme a llorar y aplazar el trasteo. 


O enfrentar la responsabilidad y hacerlo solo, así me tarde varios días. 


Como soy bastante valiente me fui por la opción 2 y comencé a subir al camión las cosas menos pesadas. 


Encima de eso comenzó a lloviznar, pero en mi mente yo me repetía, esto no me va a detener. 


La Vida me tiene que dar una solución así que adelante sin miedo y de frente hacia mi objetivo. 


Cuando ya casi había terminado con las cosas pequeñas vi que estaba pasando en frente mío un joven con una carreta de madera haciendo reciclaje. 


Yo de una lo saludé y le dije “joven ¿quiere ganar dinero?”. 


Él me dijo que si y le expliqué que era para ayudarme a trastear cosa pesadas. 


El venía tomándose una sopa en un recipiente, la dejó en la carreta y se puso de inmediato a ayudarme. 


El caso es que ese día terminé de trastear todo a las 10pm. 


Claro está que desde el fin de semana estoy bastante cansado y con dolor en todos los músculos. 


Me siento como si nunca hubiera hecho ejercicio en toda mi vida. 


De hecho, los entrenos que he realizado estos días en la madrugada han sido bastante incómodos por el dolor. 


Y lo más importante, esto me reconfirmo y entrenó a mi cerebro a no darme por vencido sino seguir adelante con fe y el propósito de las metas que uno tenga. 


A mí no me quita nadie de la cabeza que ese joven fue un enviado de la Vida. 


Y te puedo garantizar que todo en la vida es similar a lo que viví en esta pequeña aventura. 


Todo proyecto que quieras llevar a cabo, va a tener sus momentos de dificultad. 


Porque requiere cambios y ajustes en tu vida. 


Todo cambio es traumático, pero de nosotros depende hacerlo más complicado. 


O peor, desistir de él simplemente porque obtuvimos una pequeña resistencia. 


Así que quiero animarte, mediante esta información a confiar más en los procesos de la Vida. 


Tu poder superior quiere lo mejor para ti, pero debes tener carácter y abandonar el miedo venga lo que venga y que se quiera interponer.

Comparte:

lunes, 17 de agosto de 2020

La posesión en el amor



La posesión en el amor Yo creo que todos soñamos con tener una relación donde nos sintamos no solamente felices sino completamente correspondidos.

Lamentablemente el ideal del amor lo hemos estado aprendiendo del cine, la televisión etc., y no necesariamente con ejemplos de relaciones sanas.

Entre más disfuncional sea una relación, es decir más enfermiza, llena de peleas, celos etc., más pasional será la reconciliación.

Pues esto es lo que aprendimos de las relaciones intensas.

A mayor “amor”, mayor intensidad y por lo tanto debemos exigirle o buscarle cualquier situación que nos demuestre que la otra persona en verdad nos ama.

Es por eso que formamos dramas innecesarios y hasta por cosas pequeñas que no tienen trascendencia en la vida.

Buscamos problemas imaginarios para sentirnos amados por nuestro compañero o compañera.

Este tipo situaciones viene siendo “normal” en las relaciones entre adultos.

Pues como dijo en una oportunidad el doctor Luis Fernando Hoyos Aristizábal, si al ser humano adulto le hacen un test de inteligencia emocional, no pasa de los 14 años de edad.

A título personal, yo paso ante una persona con estas características, es decir, que le guste el drama y ame las reconciliaciones.

¿Pero qué tan “normal” es sentirnos dueños de nuestro compañero o compañera sentimental?

Como vimos en el vídeo anterior, LA PERCEPCIÓN DEL ABANDONO, nuestra necesidad de poseer proviene de una herida de la ilusión de la separación.

Digamos que sentir la necesidad de poseer el amor es algo “normal” gracias a esto.

Y es también “normal” que sintamos apego por una persona con la cual hemos vivido tantas cosas bonitas.

Pero no es normal que sintamos ese desespero por tener la persona que sea al lado con tal de no sentirnos solos.

Y con tener una persona, me refiero no solo a compañía, sino al aspecto romántico.

Pues una persona bajo estas condiciones no acepta por decir, una relación de amistad con alguien que le interesa de forma romántica.

Una persona posesiva no solamente está llena de miedo, desconfianza e inseguridad, sino de una de las enfermedades progresivas más peligrosas como los celos.

Personalmente llegué a escuchar gente a mi alrededor decir, que un poco de celos era bueno para la relación.

A esto le llamaban celos “sanos” pues le daban picante a una relación para que esta no se volviera rutinaria.

Tristemente los celos siempre terminan socavando el amor que pueda existir en la otra persona.

Un ser posesivo comienza sistemáticamente a prohibir cosas en el día a día de la otra persona, básicamente con dos finalidades.

La primera es controlar a la otra persona para sentirse exclusivo. Que no existe nadie más que vaya a ocupar su lugar.

La segunda es sentir correspondencia del amor, pues al ser una persona temerosa e insegura, necesita de la confirmación constante de que vale y por eso se le quiere.

Este tipo de personas tienen la autoestima ni siquiera a nivel del mar.

Es por eso que aceptan en su vida cualquier persona, lo primero que se les aparezca, así esta, de indicios que en el futuro le va a hacer pasar un mal rato.

Como puedes ver abandonar esta condición no es tan fácil por los temores e inseguridades interiores.

Existen altas probabilidades que una persona así no pueda salir sola de esa condición, sino que requiere ayuda profesional.

Sin embargo, como primer paso, esto requiere aprender a soltar a las demás personas.

Sobre todo, las que te interesan de forma romántica y trabajar con tu autoestima.

Con esto me refiero que una persona posesiva sufre bastante cuando su pareja decide compartir con otras personas socialmente sin esta.

Las famosas noches de amigas o amigos suelen ser la angustia más grande que un posesivo pueda tener.

En estas situaciones existe una línea bastante delgada entre la infidelidad y la confianza.

Pues lamentablemente los posesivos casi siempre dan con personas infieles.

Es como si estuvieran buscando este tipo de personas para poder controlar su “infidelidad”.

Algunas personas me han preguntado qué hacer en esos casos, yo simplemente les respondo que, si no hay confianza, no es recomendable estar con esa persona.

No solo es malo porque te mortifica, sino también para la otra persona pues va a actuar coaccionada mientras la puedan observar.

En otras palabras, esa persona te va a morronguear como dicen en mi ciudad natal.

Adicionalmente cuando hay desconfianza, esto suele ser tu interior que te está avisando que algo anda mal.

Si quiere conocer una información más detallada sobre este tema te invito a mirar APRENDIENDO A SEGUIR LA INTUICIÓN.

Así pues, quiero animarte a través de esta información a prestar mucha atención a las exigencias que haces hacia otras personas.

Recuerda que nadie está obligado a corresponder tus sentimientos, ni tampoco estás obligado a cumplir los caprichos emocionales de otras personas.
Comparte:

lunes, 23 de marzo de 2020

Qué es lo que le ocurre al amor



Qué es lo que le ocurre al amor Así lo aceptemos o no, el amor en pareja es tan necesario como el dinero.

Es una necesidad en nuestras vidas ya que somos seres sociables por naturaleza.

Ninguna persona es capaz de estar mucho tiempo en soledad.

Y si logra estarlo, con el tiempo va a tener la tendencia a deprimirse o sufrir un sentimiento de dolor, amargura y derrotismo.

He tenido la oportunidad de conocer personas bastante espirituales, pero de la misma forma solitarias.

Me he dado cuenta que estas personas intentan ser agresivas con todo y todos los que los rodean.

Se sienten “autosuficientes” y siempre “tienen” la razón en todo lo que enfoquen su mente.

Sin embargo, son capaces de hablarte con mucha dulzura y mirarte con compasión debido a su alto gran de espiritualidad y conexión con la vida.

Lamentablemente carecen de algo tan importante como es el amor de una pareja.

Recuerdo que cuando era un niño el romanticismo era muy común en aquellos años.

Las personas no solo se regalaban flores o chocolates, sino que también se escribían cartas.

Las parejas se casaban muy pronto y los matrimonios duraban mucho más de lo que hoy podemos ver en los que logran casarse.

Con el auge de la tecnología entraron las redes sociales.

Dejamos de escribir en papel y comenzamos a escribir en medios digitales.

Nos hemos vuelto tan desconfiados que hasta reclamamos que nuestra pareja indique que le gusta una foto de otra persona.

En otras palabras, cambiamos el romanticismo por la inseguridad.

Primero nos da pánico expresar nuestros sentimientos a alguien pues no queremos caer en la friendzone.

Queremos escuchar un te quiero de regreso si es que nos atrevemos a expresarlo.
Y si lo llegamos a escuchar de inmediato entra en nuestro corazón un nuevo miedo y es por cuanto tiempo durará ese amor.

Y así nos la pasamos en relaciones llenos de desconfianza, inseguridad, celos, enojo, tristeza y amargura.

En realidad, volvemos una experiencia tan maravillosa como lo es el amor, en una lucha constante por no ser engañado o abandonado por nuestra pareja.

A muchas personas las he escuchado decir que entre más frio el corazón viven más “felices” y tranquilos.

Pero en realidad lo único que le da sentido a la Vida es el amor en todas sus manifestaciones, especialmente el amor de pareja.

Pero en vista que todos hemos pasado por experiencias amargas en este sentido, elegimos ser fríos y calculadores a la hora de “amar” a un desconocido(a) que dejamos entrar en nuestra vida.

Otros por el contrario eligen no comprometerse con ninguna persona y en cambio “disfrutan” del cariño de múltiples besos y abrazos.

En ambos casos, nos estamos engañando pues con la mano en el corazón, ¿quién no desea estar al lado de esa persona especial que se ama y sentir que eres amado(a)?

Es por eso que podríamos concluir que las personas más “frías”, en realidad son las más necesitadas de amor.

Lo único que ocurre es que han sido lastimadas y por eso forman una coraza de protección, mostrando que son inalcanzables.

Así pues, tenemos dos caminos a seguir que son “vivir” el amor de forma sistemática para sentirnos seguros en caso de que nos intenten hacer daño.

O podemos vivir el amor sin miedo a dar ni recibir nada a cambio.

Lamentablemente el amor de pareja lo vemos como una especie de trueque donde tú me das y yo te regreso, ya sean cosas positivas o negativas.

Si me das una caricia, yo te doy otra o si me engañas, yo también te engaño.

Y puede que en este momento te estés preguntando ¿cómo dar amor sin esperar nada a cambio?

Si observas la Vida, Dios, el Universo o como quieras llamar esa presencia Divina, para todos hace salir el sol.

Lo mismo la lluvia, el alimento, el aire, etc. No se detiene a ver si le dan las gracias, o si le dan amor, etc.

Simplemente da con todo el amor pues eso es la felicidad.

El amor es buscar la felicidad y el bien de la persona amada.

¿Que cómo se podría llegar a un estado de amor tan desprendido con nuestra pareja?

Aquí es donde entra el amor propio.

Todos buscamos que nos den seguridad, felicidad y amor mediante nuestras relaciones.

Es por eso que hemos convertido el amor en un negocio o trueque donde siempre esperamos algo a cambio.

Todo eso que buscamos en otra persona nos lo podemos dar nosotros mismos.

Te aseguro que cuando lo hagas, vas a ser tan feliz que con tu pareja solo buscarás compartir ese sentimiento buscando que se sienta de la misma forma.

Así que te animo mediante esta información a retomar el camino del amor propio para expresarlo con tu pareja.

El amor, el respeto y la lealtad solo se logran cuando han sido experimentados desde tu interior.
Comparte:

Comprar PBA

Compra BPA

Contáctame

Nombre

Correo electrónico *

Mensaje *

Donaciones

Acerca de mí

Mi foto
Ingeniero de Sistemas e Investigador del Pensamiento Humano y las emociones, y como estas influyen en las decisiones que tomamos cada segundo para tener éxito o fracaso.

Notificaciones Telegram

Telegram
Canal Ingeniero Gabriel Salazar / AUTOPODER Recupera tu Poder Interior

Para recibir el vídeo de cada lunes en tu Telegram:

Ingresa a:
t.me/autopoder1
t.me/IngenieroGabrielSalazar
Grupo Telegram:
t.me/+Z7ZMi8tw4WdjYTcx

Vídeo Bienvenida

YouTube

Copyright © Ritmo Positivo 2009 - 2024. Con tecnología de Blogger.