Retoma el control de tu vida. Estrategias efectivas para el control emocional

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lunes, 20 de febrero de 2023

La confianza en tu Poder Superior



La confianza en tu Poder Superior

De una u otra forma, todas las personas profesamos una creencia en un Poder Superior.

Ya sea que lo llamemos Dios, Universo, o como en mi caso Vida.

El hecho, es que siempre acudimos a esta Fuerza, que muchas veces es incomprensible, porque nos ayuda o nos “deja morir”, para alcanzar nuestros objetivos o porque no, nuestros caprichitos.

Así mismo nos llenamos la boca de orgullo diciendo que sin Él no somos nada, que nos acompaña y bla bla bla.

Pero, si tú eres bien observador, notarás que esa Fuerza Suprema al parecer ignora a la mayoría, pues no necesariamente vivimos de acuerdo a nuestras peticiones.

Literalmente la gente pasa demasiadas necesidades y eso hace que nos preguntemos: “¿bueno y es que estamos solos y sin ayuda?”.

“¿O será que ese Poder Superior lo tenemos de adorno simplemente?”.

Bueno, con estos ojitos que tantas cositas bonitas han visto, he observado como a una buena amiga la Vida la favorece en todo lo que pide.

Y en caso de que estés pensando que por ser atractiva la gente le ayuda en todo, estás equivocado.

Mi amiga es una mujer de más de 60 años y hace mucho tiempo que se separó de su marido y vive sola.

No tiene la ayuda económica de nadie y es una persona que, con su propio esfuerzo y confianza en Dios, ha conseguido todo lo que se ha propuesto.

Por ejemplo, en mi caso toda la vida sentí que le hablaba a la pared, cuando sostenía un dialogo con Dios.

Es más, ni siquiera sentía alguna clase de afecto por esa figura.

Pero cuando mi hija Isabellita nació, eso cambió de forma instantánea.

Es por eso es que yo le decía, que era mi conexión con Dios.

Antes de eso, tenía la sensación que todo lo que hacía o lograba era por mi propia cuenta y riesgo.

Y esto no solo lo he pensado yo.

Lamentablemente la humanidad predica mucho su creencia en un Poder Superior, pero que les sirve de adorno porque sus vidas llevan una gran carga de infelicidad.

Y exactamente sé esto, porque constantemente las personas se quejan de su situación y tienen la sensación que todo el universo está de la misma forma.

Y cuando ven que otra persona no está pasando por lo mismo, allí es cuando nacen los famosos sentimientos de envidia.

De rabia e impotencia porque sienten que a otros les va bien y no saben por qué.

O que esa gente exitosa les está quitando algo y es por eso que les va bien a ellos.

Y mira que no necesariamente una persona tiene que estar “mal” para sentir este tipo de emociones destructivas como la envidia.

He observado con estos ojitos que tantas cositas han visto como gente que “tiene todo” sienten envidia porque otro es feliz, aunque no tenga nada.

Le critican su manera de actuar, sus conocimientos o lo que sea.

Y aunque te parezca increíble he visto gente arder de rabia ver a una pareja de gente de la calle, tomados de la mano.

Personas que no tienen nada pero que la están pasando bien.

Así que el éxito no es sinónimo de tener dinero, comodidades, conocimientos o titulos.

Y en este momento tal vez me preguntes: “bueno Gabrielito lindo, ¿cómo entonces se puede cambiar ese punto de vista y usar la Fuente de la Vida a nuestro favor?”.

Mira todo cambio de perspectiva es posible gracias a tomar consciencia de las situaciones.

Por ejemplo, el trabajo que tienes o la actividad que realizas para ganar tu dinero no es producto de la casualidad.

La mayoría de los trabajadores viven con miedo a perder su empleo.

Y es por eso que literalmente permiten que otros se les monten encima y abusen de ellos.

Es aquí cuando una persona ingresa en un ciclo de infelicidad, en el cual hace su trabajo con miedo y desgano por dinero.

Mejor dicho, está vendiéndole el alma a Satanás a cambios de unas pocas monedas para medio comer.

El miedo es una plegaria para que eso ocurra.

Y al final, este empleado, por hacer de forma mediocre e inconsciente su trabajo, tiene altas probabilidades de ser despedido.

¿Puedes ver que es aquello que exactamente está entorpeciendo el camino de esa persona?

Exactamente es su falta de confianza en los procesos de la Vida.

En conclusión, si estás en una situación similar o temes porque tu negocio no va bien, recuerda hay un poder que está detrás de ti acompañándote.

Que ese Dios no sea un adorno innecesario en tu vida.

De nada te sirve decir que Dios esto o lo otro, si cuando llega el momento de confiar en ese Poder, terminas teniendo fe en tu fracaso.

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lunes, 13 de febrero de 2023

El problema de las oportunidades perdidas



El problema de las oportunidades perdidas

Yo creo que una de las cosas que más escucha Dios de parte de nosotros, no son las gracias, sino nuestras peticiones y ruegos para que las cosas nos salgan como las queremos. 


Me lo imagino colocándose la mano en la frente y diciendo “huy no, allí está de nuevo esa cansona o ese cansón con sus caprichos”. 


Pero hablando en serio, todos le pedimos constantemente a la Vida que tengamos un buen trabajo, una excelente salud, y muchos otros por supuesto tener a su amorcito al lado. 


El problema es que muchas veces, eso que pedimos no es lo que esperamos y allí es donde pecamos con nuestra ingratitud. 


Para que me puedas entender un poco mejor, hace algunos días, mi nutricionista (a la cual le mando un abrazo si me está viendo), me contó una historia sobre una sobrina de ella que pasó muchos años preparándose profesionalmente. 


Finalmente, cuando llegó la hora de conseguir un empleo, ninguno le servía porque no estaban acorde a su nuevo estatus de profesional. 


Tristemente en su casa, llegó una temporada donde comenzaron a experimentar bastantes dificultades económicas. 


Y al parecer muchas veces sólo podían comer 1 vez en el día. 


Bueno esta señorita en ese periodo se daba el “lujo” de no aceptar trabajos, porque no estaban acorde a sus capacidades como profesional 


Y así siguió pasando el tiempo, que aproximadamente fueron unos 3 años. 


Por decir algo, si en un trabajo le ofrecían unos mil dólares mensuales, ella lo rechazaba pues según sus capacidades merecía 5 mil dólares como mínimo. 


Al final cuando estaba “mordiendo cable” (como se dice en mi país), tuvo que aceptar un trabajo de 500 dólares para poder ayudar con los gastos básicos de supervivencia en casa. 


Y mira que cuantas veces esta señorita no le llegó a pedir a Dios que le ayudara a conseguir un trabajo. 


Lamentablemente esas ayudas que la Vida le enviaba, a ella no le eran suficientes, pues esperaba siempre lo mejor. 


Sus parientes siempre le decían: “toma ese trabajo, a lo mejor por allí te das a conocer y comienzas a avanzar hasta ganar lo que esperas”. 


No había poder humano ni celestial que le iluminara la mente a esta señorita. 


Y todo porque su ego, que nos ayuda a avanzar, pero que también nos mete la pata, le “dictaba” que no aceptara migajas en su vida. 


¿Quiere decir esta experiencia que debemos ser conformistas con las oportunidades pues quizás este es nuestro camino? 


No necesariamente. 


Por ejemplo, en mi caso, cuando yo me encontraba “mordiendo cable” tuve muchas oportunidades para ir a ganarme un salario mínimo. 


Tuve una situación similar a la de la señorita del ejemplo donde las personas a mi alrededor me decían: “Gabrielito vaya y tome eso, aunque sea”. 


Pero en mi caso ocurría algo bien curioso. 


Es como si una voz desde mi interior y en forma de sentimiento de amor me decía: “Nuuuu Gabrielito, no haga eso porque allí te vas a quedar por siempre, ganando ese valor”. 


Y adicionalmente “me decía” que siguiera como iba a pesar que aún no viera la luz al final del túnel. 


Lo extraño de eso es que la voz del ego siempre va acompañada de un sentimiento de conflicto. 


En mi caso era un sentimiento de mucho amor y paz, como si mi interior me estuviera diciendo “confía que todo va a salir bien”. 


Bueno, Gabrielito lindo decidió confiar y no dejarse llevar por el miedo o desespero y el tiempo me confirmó que ese fue el camino correcto pues logré salir de esa mala racha en la que estaba. 


Por eso siempre reconozco que, si fuera por mí, todavía estaría mordiendo cable. 


Definitivamente algo superior me ayudó y me sacó de todo eso. 


Y tal vez me preguntes, “bueno Gabrielito lindo, entonces ¿qué debo hacer si me encuentro en esa situación para no dejar perder oportunidades?”. 


Aquí es donde entra tu sabiduría. 


Y esto es algo que le aprendí hace muchos años a un socio de negocios que tuve. 


Él decía constantemente que a Dios no se le deben pedir riquezas, sino sabiduría. 


La intuición en las oportunidades es muy importante. 


Hay que aprender a escuchar las emociones, pues como dice el libro Conversaciones con Dios, el sentimiento es el lenguaje del alma. 


Si tienes que tomar una decisión, enfócate más bien en cómo te hace sentir si tomas un camino o el otro. 


Si tu sentimiento es de alegría, verdad y amor, ten por seguro que ese es el camino que la Vida tiene para ti.

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lunes, 6 de septiembre de 2021

La importancia de ser solidario



La importancia de ser solidario

Hace algunos meses, debido a una serie de protestas y bloqueos en las vías, algunos productos de consumo diario subieron de precio. 


Especialmente esto ocurrió con los huevos y la carne. 


Cosa bastante extraña que no ocurrió con la gasolina. 


Lamentablemente muchas de estas empresas avícolas y ganaderas sufrieron pérdidas millonarias. 


Pero tampoco, nunca falta el aprovechado que utiliza estos momentos para hacer de las suyas. 


Imagínate que el valor de promedio de 30 huevos era de 2 USD aproximadamente. 


Debido a toda esta situación social lo comenzaron a vender, más o menos, al doble. 


Muchas personas no podían comprar esto. 


Sin embargo, otro tanto si lo hacía como si nada estuviera pasando. 


En mi caso cuando me vinieron a ofrecer ese valor, mi respuesta inmediata fue paso. 


Y la verdad tengo como pagar, pero en mi consciencia está no apoyar de ninguna manera el abuso de las demás personas que por falta de recursos no pueden hacerlo. 


Esto es lo que se conoce como solidaridad. 


Me da vergüenza decirlo, pero nuestra cultura a nivel mundial es bastante egocentrista. 


Después que tengamos la barriguita llena y el millón de dólares en la cuenta de nuestro banco, el resto del mundo, puede arder. 


Como ya hemos visto en otros temas, esta Vida es bastante irónica y da muchas vueltas. 


Recuerdo la sensación que tenía en medio de mi crisis económica y veía como otros se divertían, mientras yo pensaba en cómo salir de esa mala racha. 


Por mi cabeza pasaba mucho la pregunta, ¿será que esto algún día terminará y volveré a sonreír? 


Quizás es por eso que, en la actualidad, mi ética me impide dejar de ser solidario con las personas que me rodean. 


Y no te estoy diciendo que debamos compartir absolutamente todo con los más necesitados. 


Eso sería irse al otro extremo e impediría el progreso económico del planeta. 


Toda labor que se hace tiene fruto y los seres humanos deben ser responsables consigo mismos y generar sus propias oportunidades. 


No esperar a que venga otro a solucionarles la vida. 


Si observas, nada en la naturaleza funciona de esta forma. 


El orden natural es que cada uno se debe labrar su propio camino ya sea de bienestar o de malestar. 


Pero hay que tener presente que el dinero que obtienes proviene de infinitas transacciones que directa o indirectamente realizan esas personas que desprecias. 


Con esto quiero decir que, si el flujo del dinero se interrumpe para algunos, esto en algún momento te va a alcanzar a ti. 


Así es que funciona la economía en nuestro planeta y más ahora que estamos tan cerca de otros países gracias a las comunicaciones. 


Si observas el principio de esta historia, la solidaridad puede ser un camino para construir un mundo mejor. 


Ante las injusticias que las personas consideran que comenten sus gobiernos locales, mucha gente opta por salir a realizar bloqueos o protestas como ocurrió hace algunos meses en mi país. 


La respuesta ante esto obviamente fue la violencia. 


Sin embargo, la gente no fue inteligente y se puso a agredir a los agentes de la ley. 


Esto se volvió una retroalimentación de violencia en la cual, por lógica los ciudadanos llevaron la peor parte. 


Mucha gente perdió alguno de sus ojos, otros fueron heridos y en otros casos hubo hasta muertos. 


Básicamente esto ocurrió porque bastante gente se solidarizó con los menos favorecidos que estaban protestando. 


Al final esos bloqueos en las vías, terminaron perjudicándonos a todos. 


Los productos encarecieron como mencioné inicialmente. 


Nada de esto hubiera pasado si las personas comprendieran el valor del boicot comercial. 


Mira, sin necesidad ni siquiera de ir a recibir el sol, maltrato, violencia o lo que sea que se derive de una protesta, en la comodidad de tu casa esto se puede hacer. 


Es solidarizarse no consumiendo algún producto que se mire como objetivo. 


No ver TV por ejemplo una semana, evitar el consumo de combustible por el mismo tiempo, etc., son formas (entre muchas) bastante efectivas de hacerte escuchar. 


Tristemente el ser humano no aprende y le encanta complicarse la vida. 


Le gusta ir a maltratar y a recibir el maltrato de otros porque piensa que es el único camino para hacerse valer. 


Muchas veces lo repito al final de estos temas que a las crisis nunca se sale de ellas con la fuerza. 


Se necesita usar más el cerebro y planear estrategias para enfrentar los problemas. 


Así que quiero animarte mediante esta información a pensar un poco más en tu prójimo y no únicamente en tu existencia. 


Por algo la Vida nos puso aquí juntos. No solamente están para enojarnos con ellos, sino hacen lo que queremos.

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lunes, 26 de julio de 2021

El hábito que más aleja el Dinero



El hábito que más aleja el Dinero

En una encuesta que se realizó en Estados Unidos y México, por parte del Centro Giordani hace ya varios años, se les preguntó a las personas sobre cuál era su área de mayor problema entre la salud, el dinero y el amor. 


Un 10% de las personas encuestadas afirmaba que su problema mayor era con la salud. 


Otro 10% respondieron que era el amor. 


Sin embargo, un increíble 80% de personas encuestadas afirmó que el dinero era un área que les generaba mucho malestar. 


Y si analizamos estos datos, un 80% de personas que se quejen sobre lo mismo no puede ser casualidad. 


Algo deben estar haciendo mal estas personas, para que las cosas no funcionen bien en un área tan importante de nuestras vidas. 


Como ya hemos visto anteriormente, el dinero es más que un objeto. 


Este tiene que ver mucho con nuestras creencias y la relación que formamos desde niños con él. 


Por ejemplo, si en tu casa el dinero era un impedimento para disfrutar de algo, aquí formaste una relación negativa hacia el dinero. 


Y puede que tú me digas en este momento, “pero Gabrielito lindo, yo ni siquiera recuerdo que se decía en mi casa sobre el dinero.” 


Este tipo de cosas posiblemente ocurrieron estando muy pequeño. 


Pero el psicoanálisis define la vida de un infante como un ser pensante, aunque inconsciente. 


Tu pequeño cerebro procesa absolutamente todo, y aunque no seas consciente en esos momentos, dicha información queda grabada en tu sistema nervioso en forma de emociones. 


Así que es imposible sustraerse ante la información que recibas en tu infancia. 


Especialmente la información que recibimos en esta etapa, forma nuestra personalidad de adultos. 


¿Puedes ir comprendiendo, por qué, a pesar de no recordar mucho esta etapa, en tu vida de adulto se presentan problemas con el dinero? 


Es como si este fuera una energía inteligente que no quiere estar con nosotros y se nos escapa de las manos. 


Y efectivamente por aquí comienza el segundo problema con el dinero. 


El 99% de las personas vemos el dinero como un objeto. 


Y esto es lógico pues durante toda nuestra vida vemos que con él podemos comprar diferentes artículos para hacer nuestra vida más agradable. 


Pero también vemos como nos negó y nos ha negado realizar muchas otras cosas. 


En realidad, el dinero es un símbolo, una representación de lo que podemos hacer por otras personas. 


Digamos que tú trabajas en un almacén de cadena como cajero. 


El trabajo que realizas no se te paga porque seas atractivo(a), porque sonrías muy lindo o porque el uniforme te queda muy bien. 


Estás realizando una labor que en este caso es el recaudo del dinero que entregan las personas como compensación al producto que se llevan. 


Ellos a su vez obtuvieron ese dinero que te están entregando como símbolo de una labor que hicieron previamente. 


Así pues, tu dinero, eso que simboliza tu labor en dicho almacén, también en algún momento se lo entregarás a otra persona o entidad para llevar más bienestar a tu vida. 


Las relaciones comerciales humanas se han llevado toda su historia de esta forma y todo comenzó con el famoso trueque. 


Donde las personas intercambiaban por ejemplo frutos por pieles y muchas otras cosas más. 


Para que la persona tuviera esos frutos o lo que fuera a cambiar por lo que necesitara, tuvo que realizar una labor para obtenerlos. 


Esa labor fue representada en el bien que obtuvo y que va a intercambiar con otra persona. 


El concepto del dinero lo único que nos facilitó fue ser más livianos a la hora de intercambiar una cosa por la otra. 


Pero este concepto de dar y recibir es legendario. 


Muchas personas se han preguntado ante los problemas de dinero, si debería imprimirse más. 


El problema con esto es que, si imprimimos dinero de la nada, como por arte de magia, este, automáticamente perderá su valor. 


Esto es lo que se conoce en economía como la devaluación del dinero. 


Imagínate por un momento que hay demasiada circulación del dinero para que todos tengan como comprar. 


Las personas pueden comprar muchas cosas y estas comienzan en algún momento a escasear. 


Los artículos suben demasiado de precio con el fin de equilibrar la escasez. 


Mucha gente da grandes cantidades de propina por ejemplo a quien cuida su auto. 


Y no es porque no lo merezca, pero a nivel general se va generando una pérdida del valor del dinero, ya que este abunda por todas partes sin haberse generado por la labor de alguien. 


Como puedes ver, la solución a un problema económico no es la impresión del dinero, sino la producción o labor que hagan las personas para generarlo. 


Es por eso que, en las crisis económicas, las personas que se quedan esperando a ver que hacen otros por ellos, tienen bajas probabilidades de salir de ese caos. 


En cambio, muchos otros se vuelven ricos, debido a que se dedican a producir ideas para captar dinero. 


Pero aquí viene un tercer y verdadero problema con el dinero. 


En su totalidad, las personas están buscando solo hacer una labor y obtener dinero por ello. 


No están pensando en el servicio que hacen hacia los demás. 


Es por eso que tú ves gente trabajando 14 o más horas en el día para ganar solamente un salario mínimo legal. 


Es como si entre más trabajo duro hicieran, menos dinero reciben. 


Aquí podemos pensar, pero los empresarios son injustos, lo gobiernos, la vida, etc. 


El peor rol que podemos llegar a tomar en la vida es el de la victimización. 


Si somos víctimas, nos vamos a quedar allí esperando que alguien nos salve. 


Es por eso que muchas veces he recomendado en este blog, que si quieres dinero NUNCA, JAMAS, trabajes para gente pobre. 


Si no tienes más opción por el momento toma lo que tienes a la mano y trabaja, pero NUNCA, JAMAS te quedes allí para luego quejarte. 


Míralo como una solución temporal pero no vayas a hacer como las “medidas provisionales” que tomamos los seres humanos y que a la final terminan siendo medidas eternas. 


Como una vez lo definió mi hermano mayor, el dinero es como las mujeres bonitas. 


A cada rato le dicen cosas, halagos, les dan regalos, etc. 


Estas mujeres viven aburridas de tanta adulación que reciben. 


Vienes tú y le dices, “hola guapa”, de inmediato piensan “ahhh ya viene este otro a molestar” y se alejan de ti. 


Exactamente esto pasa con el dinero. 


Entre más lo persigas, más se va a alejar de ti. 


Adicionalmente las personas empeoran su situación porque basan su economía en el crédito o préstamos en vez del ahorro. 


No existe mayor cosa que cause insomnio que una deuda. 


Viajes, vehículos y hasta comida fiada da la mayor intranquilidad que el ser humano pueda experimentar. 


En mi caso prefiero aguantarme unos días y ahorrar para después comprar con la tranquilidad que no le debo nada a nadie. 


A nivel personal yo perseguí el dinero por muchos años y este me dejaba en visto. 


En la actualidad ni le presto atención, y tú nunca me ves con problemas de dinero o asado como decimos en mi localidad. 


Lo veo como una herramienta para adquirir bienestar y como una consecuencia del servicio y amor que presto hacia los demás. 


Así que quiero animarte, mediante esta información a dar primero con amor, para recibir de la misma manera. 


Finalmente si buscas algo desesperadamente es porque careces de ello, y por lo tanto el Universo responderá a dicha emoción de carencia con más carencia.

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lunes, 3 de mayo de 2021

Cuando insistimos en seguir perdiendo



Cuando insistimos en seguir perdiendo

Nuestro gran amigo el doctor Albert Einstein definió la locura como hacer lo mismo una y otra vez, con la esperanza de tener resultados diferentes.


¿Cuántas veces no nos ha llegado a pasar esto, que insistimos en hacer las cosas de la misma manera esperando que nuestra vida cambie milagrosamente?


Respecto a esto, hace ya bastantes años, conocí a un joven bastante talentoso en el diseño.


Trabajaba para un negocio donde se dedicaban a instalar sonido en los automóviles y también a crear interiores en estos, bastante atractivos.


Y se notaba que este joven era el genio detrás del éxito de este negocio.


Y en cierta oportunidad me pidió que si lo podía acercar a su casa.


Mientras íbamos por el camino, me preguntó a que me dedicaba y que tal me iba en la vida.


Me dijo que era muy afortunado y le dije que el también lo era, pues había nacido con un talento increíble para el diseño.


En eso me contó que tristemente no le pagaban lo suficiente por todo el trabajo que hacía.


Según lo que me describió, este joven prácticamente era un esclavo en dicha empresa.


Y sus “jefecitos” se escudaban en que, al no poder trabajar los fines de semana, por causa de sus convicciones religiosas, le negaban el pago que “merecía”.


Y hasta aquí podemos decir que hay gente muy boba que sufre por gusto.


Y he llegado a escuchar respecto a esto expresiones como “este es mucho bobo tan tonto, como se deja morir de hambre”.


Recuerda que nosotros somos muy “valientes” con la barriguita llena y el millón de dólares en nuestra cuenta bancaria.


Decir que voy a hacer esto o lo otro en estas condiciones en bastante fácil.


Pero cuando una persona creció con carencias y sobre todo aprendió desde su infancia que otros si tenían derecho, esto no es tan fácil que digamos.


Lamentablemente bajo estas condiciones, este joven no se tenía la confianza suficiente para iniciar su propio negocio.


Lamentablemente las creencias juegan un papel bastante crítico en las decisiones que tomamos para vivir bien o mal.


Por ejemplo, cuando aun estaba en la educación básica secundaria, tuve una compañera que fue bastante influenciada por las creencias religiosas.


Esta señorita tenía la creencia que, si se “portaba bien”, su Creador la tendría en un paraíso perfecto, con todo lo necesario para vivir feliz para siempre.


Así pues, ella decidió que no era importante educarse para un futuro, pues finalmente cuando fuera adulta, ya estaría viviendo en un paraíso.


¿Y adivina cómo se ha desarrollado su vida como adulta?


Por una amiga en común, me enteré que se casó con un hombre bastante similar en su pensamiento.


Ambos pasan dificultades y aunque no lo creas, siguen esperando que el paraíso le llegue a su casa con todo lo necesario para vivir felices.


Y puede que tú lo consideres una broma o que estoy exagerando, pero tristemente esta es la realidad de millones de personas en la actualidad.


Ahora no es que salgas corriendo a abandonar tus convicciones religiosas.


No te estoy diciendo que manejar este tipo de información sea malo.


De hecho, cualquier persona vive una mejor vida, si tiene un Poder Superior que lo está apoyando.


Pero como puedes observar, este Poder Superior debe apoyarte, ser una ayuda para ti y no un canasto que debas cargar, lleno de piedras.


No se trata de cambiar de una creencia para irse a otra y quedar en las mismas o peor.


Esto es similar cuando se hacen reparaciones en una casa.


No se destruye la casa y se construye nuevamente.


Se reparan las cosas que ya están dañadas.


Esto mismo debemos hacer con nuestra vida.


Por lo general tenemos la creencia que todo el mundo es feliz y exitoso, menos nosotros.


Por eso intentamos presumir para no pasar como fracasados ante nuestro círculo.


Entonces no debemos cambiar de vida, ni de trabajo o ciudad, sino de los hábitos que nos están perjudicando, si queremos ver cambios.


Te puedo asegurar que la Vida quiere lo mejor para cada uno, pero nosotros vivimos mal interpretando sus intenciones.


La Vida nos da mensajes que no sigamos determinado camino y nosotros de tercos, porque en algún punto nos funcionó, insistimos.


Mira por ejemplo lo que ocurrió desde el año 2020.


Muchos negocios tradicionales se fueron al tarro de la basura.


Pero también surgieron nuevas oportunidades y los que aprovecharon se hicieron ricos.


De hecho, fue algo que mencioné en la entrada CÓMO ACTUAR ANTE LAS CRISIS EMOCIONALES, que escribí a principios de la cuarentena el año pasado.


Donde expresaba que esta situación se verán nuevas oportunidades para unos y también nuevos fracasos para otros.


Y eso que ese tema fue grabado 3 semanas antes que lo vieras, pues yo prefiero grabar anticipadamente, así que tengo dotes de profeta 😁 


Y puede que en este momento me preguntes, “pero Gabrielito lindo, ¿cómo puedo cambiar de camino, si no se me ocurren ideas?”


Entonces debes cambiar de fuentes de información.


Mira, nosotros somos el resultado de las compañías que tenemos así lo neguemos rotundamente.


Si yo mantengo con borrachos, ¿pues como voy a sentir, pensar y actuar?


Si estas rodeado de personas con grandes metas, enérgicas y llenas de amor, ¿cómo supones que será tu vida en un tiempo?


Así que quiero animarte, mediante esta información, a no insistir en lo que estás haciendo, si quieres obtener resultados diferentes.


Si ya te aburriste del rol que has cumplido hasta ahora, entonces comienza a crearte una nueva vida de bienestar.

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lunes, 8 de marzo de 2021

Qué es la Neofilia y como nos puede ayudar o perjudicar



Qué es la Neofilia y como nos puede ayudar o perjudicar

La Neofilia se podría definir como un tipo de personalidad que tiene fuerte simpatía por la novedad.


Este término se popularizó gracias al escritor estadounidense Robert Anton Wilson, el cual además era un psicólogo profesional.


Cuando decimos que una persona tiene este tipo de personalidad básicamente tiene la capacidad de adaptarse a los cambios extremos.


Es una persona que rechaza mucho la tradición, la repetición y la rutina.


Por consiguiente, tiene la tendencia a aburrirse mucho de las cosas viejas, ya sean estas cosas o pensamientos.


Y sobre todo tiene casi que una obsesión por experimentar nuevas cosas o crearlas, logrando ciertos conflictos con otras personas o leves disturbios.


Hay que aclarar que un Neófilo no tiene nada que ver con un revolucionario.


Cualquiera puede ser revolucionario si sus intereses están en peligro de extinción.


Pero sí podríamos decir que un Neófilo es un revolucionario por naturaleza, pues su rechazo intelectual por la repetición y tradición lo impulsan a la novedad.


Lo opuesto de una personalidad Neófila podríamos decir es una personalidad Neófoba.


Un Neófobo considera a su contrario “un hereje”, “un anatema”.


Aparte de esto, lo ve con miedo y sobre todo desprecio.


Viendo estas definiciones, podríamos sentir mayor simpatía por los Neófilos pues al fin y al cabo a todos nos gusta el progreso.


Pero ambos conceptos tienen sus pros y contras.


Por ejemplo, un Neófilo tiene la tendencia a analizar una película realizada en los años 90, bajo la estructura social del 2021.


Es bastante incoherente pedirle al pasado que se “arrepienta” de sus pecados.


Lo mismo para su contraparte, quedarse con las mismas ideas puede ser contraproducente.


Debemos evolucionar y no quedarnos en lo mismo, pues vamos a seguir viviendo las mismas experiencias una y otra vez.


A parte que la Vida siempre avanza constantemente y nos va dejando atrás.


¿O eres de los que espera siempre ganar la misma cantidad de dinero solo por tradicionalismo?


La verdad, no he conocido el primer ser humano que diga voy a quedarme estático donde estoy.


Siempre buscamos ser más, tener más y hacer más.


Aunque la Neofilia no está considerada como una enfermedad, los especialistas en emociones reconocen que si hay algo enfermizo en esta conducta.


Un claro ejemplo de esto se ve cuando las compañías de tecnología, cada año sacan su versión mejorada del dispositivo que consumes.


Se pueden observar largas colas en los almacenes por adquirir la nueva versión.


Incluso algunos llegan a pasar la noche, acampando frente al almacén para que nadie les gane la fila.


O cuando el sistema operativo ya sea de nuestro teléfono, laptop o Smart TV va a sacar una actualización, estamos pendientes de bajarla y ni siquiera dejamos que esto sea automático.


Esto se ve mucho en mi profesión con los lenguajes de programación y los frameworks que vendrían siendo herramientas para ayudarte a programar más fácil.


Constantemente salen actualizaciones y no solo eso, no has terminado de manejar un lenguaje a plenitud cuando ya sale otro “mejor” pero que hace lo mismo.


Como puedes ver, esta “obsesión” por estar actualizado en si no es perjudicial.


Por eso no se considera una enfermedad mental o emocional, sino más bien una obsesión.


Pero finalmente, como toda obsesión, nos trae estrés, ansiedad e infelicidad.


No permite que finalmente nos enfoquemos en lo que tenemos, sino que estemos procurando “obsesivamente” tener lo último, así esto sea de peor calidad que lo anterior.


Por ejemplo, muchos lenguajes de programación se han utilizado para crear sistemas de información.


Uno de ellos fue el famoso Cobol creado por allá en el año 1959.


Increíblemente en pleno siglo 21 aún existen sistemas informáticos que fueron creados por este lenguaje.


Por supuesto, gracias a nuestra Neofilia, es un lenguaje que paso de moda y poco se desarrolla en él.


Sin embargo, debido a la baja demanda de programadores conozco un par de amigos en Argentina que ganan grandes cantidades de dinero debido a sus habilidades con Cobol.


Por lógica, los lenguajes novedosos tendrán más demanda de desarrolladores y en esto, las leyes de oferta y demanda del mercado son implacables.


Puede que en este momento me preguntes, “pero Gabrielito lindo, ¿cuál debería ser nuestra postura ante la vida?”


De acuerdo a mi experiencia, lo mejor que puedes hacer en tu vida es enfocarte en algo.


Dispensarte entre tanto conocimiento, no es buena idea, pues te la pasarás como una hoja ante el viento.


Yo creo que uno debe tomar lo mejor de las cosas que llegan a tu vida.


Todos los extremos en la vida son negativos.


Es bueno enfocarse en algo, pero también mirar opciones de aquello que tienes para ver si lo puedes mejorar.


Lo importante es que aquello que decidas hacer, hazlo como si fuera tu máxima obra maestra.


Finalmente, aquello que hagas va a ser utilizado por otros.


¿Te gustaría usar algo hecho por un mediocre?


Entonces de la misma forma hagas lo que hagas coloca todo tu amor y empeño para que salga bien.


Y ese incremento que están buscando las personas para mejorar sus vidas, las atraerá a ti.


Así pues, quiero animarte mediante esta información a tomar lo mejor de cada cosa que aprendes.


Quédate sólo con lo que te sirva y así tendrás una mejor calidad de vida.

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lunes, 11 de enero de 2021

La importancia de la actitud positiva



La importancia de la actitud positiva

Cuando me comenzaron a interesar los temas de superación personal, por allá en el año 2006 di con alguna información interesante.


Incluso llegué, por recomendación de un amigo, a ver una película llamada el Jarrón Azul, basada en el libro del mismo título.


Esta narra la historia de un joven minusválido que ante las adversidades posee un gran coraje y logra salir adelante.


Cuando vi esto, me preguntaba, ¿cómo era posible que una persona sonriera y tuviera una actitud positiva cuando la vida no era muy amable que digamos?


Y yo creo que todos en algún momento nos hemos sentido de esa forma y por eso llegamos a la conclusión que eso solo pasa en las películas.


La verdad, la primera reacción que todos sentimos ante las adversidades es la depresión y el derrotismo.


Queremos tirar la “toalla”, e incluso en algunas ocasiones, no queremos saber nada más de la vida.


Por ejemplo, cuando llegué a vivir en el pasado cosas bastante desagradables, por mi cabeza pasó muchas veces irme de este plano.


Sin embargo, el pensar en si no era capaz de darle bienestar a mi hija estando vivo, mucho menos partiendo de este planeta.


Podemos concluir que ante las adversidades existe algo fuera de nosotros que nos obliga a seguir adelante.


Pero si de nosotros dependiera, las probabilidades de mortalidad serían más altas que las actuales.


Hasta aquí uno puede pensar que ser positivo ante la adversidad es una utopía.


Pero este fatídico año 2020 me demostró con un amigo y vecino la importancia de mantener una actitud positiva, aun teniendo “el agua en el cuello”.


Para comenzar, este hombre, fue despedido de su empleo.


La verdad nunca lo vi triste o deprimido pues como el mismo me llegó a afirmar, eso era cavar su propia tumba.


Prefirió mantener la fe y esperanza de que algo bueno venía para él, después de todo esto.


Posteriormente su señora madre enfermó de gravedad y debía transportarla cada semana a otra ciudad para su tratamiento médico.


Esto no fue cuestión de pocas semanas, sino que fue algo de meses.


Encima, nos encontrábamos en una pandemia junto con una cuarentena y pues con la señora había que tener cuidados extremos.


Finalmente, se le presentó una oportunidad laboral, pero su salud empeoró.


Venía padeciendo fuertes dolores estomacales que resultaron en realidad ser cálculos biliares.


Esto terminó en intervención quirúrgica que le costó unas semanas de bastante cuidado.


Como quien dice, este hombre sacó el premio mayor de la lotería del infortunio 2020.


Sin embargo, en todo este tiempo desempleado, con su señora madre enferma y con su propia salud en riesgo, dedicó tiempo a aumentar sus habilidades en mecánica.


Aprendió a arreglar desperfectos de su auto y a mejorar sus habilidades en la hoja de cálculo Excel.


Puedo dar fe plena que, en ningún instante, mientras vivió esto que muchos consideramos un camino de espinas, sentirse triste o derrotado.


Siempre lo vi con una actitud positiva y una confianza en que todo iba a mejorar.


Y efectivamente, unos días después de su recuperación, así, de la nada, obtuvo una oportunidad laboral con un excelente ingreso económico.


Incluso, anoche que estuvimos conversando me contó que, gracias a sus habilidades en Excel, ahora se ha convertido en una pieza clave de la empresa con la que trabaja.


Como puedes ver, muchas veces pensamos que hablar con Dios, la Vida o como prefieras llamarlo es sostener una conversación natural.


Como dice el libro Conversaciones con Dios, el sentimiento es el lenguaje del alma.


Es decir que nosotros nos comunicamos con la Vida mediante nuestras emociones.


Si nuestras emociones son de derrotismo, ¿adivina que cosas vas a experimentar próximamente?


¿Entiendes porque la mayoría de personas parece que estuvieran en un ciclo infinito de desgracias y creen que tienen mala suerte?


Si observas, la historia de este amigo, siempre le estuvo transmitiendo una señal al Universo de querer ser útil, de servir y de ganar a pesar que el mundo se estuviera derribando a pedazos.


Por más que el le hubiera rogado a Dios que lo ayudara, si él no hubiera tenido esa actitud positiva, jamás se le habrían presentado las oportunidades que tiene ahora.


Por ejemplo, en mi caso, yo le imploraba a Dios que me sacara de ese sufrimiento y la verdad me dejaba en visto.


Pero era porque la Vida no encontraba coherencia entre mi lenguaje y mi actitud derrotista.


En el momento es que todo esto comenzó a apuntar hacia el bienestar, de inmediato noté que mi vida cambió.


Muchos le rogamos a Dios por un cambio, para que mejore nuestra vida.


Le decimos “Dios mío, aunque sea…” esto o lo otro.


Con una actitud lastimera lo único que vas a obtener es migajas de la vida.


A Dios, el Universo o la Vida hay que darle las gracias por lo que estás pidiendo y que ya viene en camino.


Es la actitud tuya la que determina el milagro o la limosna en tu vida.


Así que quiero animarte mediante esta información a tomar conciencia de las actitudes que mantienes ante las adversidades.


Nadie sabe que nos espera este año nuevo 2021, pero a partir de este momento sabemos que vamos a recibir, si no tenemos una actitud positiva.


Vive con valor y siempre espera lo mejor, pues lo mejor aún está por llegar.

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lunes, 7 de diciembre de 2020

El problema de las emociones e ideas preconcebidas



El problema de las emociones e ideas preconcebidas

Yo creo que todos en este planeta nos ha ocurrido que tenemos que hacer algo y de inmediato sentimos malestar.


Trátese de comer algo, ir a algún sitio o realizar alguna actividad, sentimos predisposición, malestar y pereza de actuar.


Finalmente, cuando nos tocó hacer o probar la tarea correspondiente, nos damos cuenta que era algo espectacular y que nos estábamos perdiendo de algo.


Esto suele pasar mucho en los niños cuando se les da a probar algo por vez primera.


Ellos se niegan y una vez que lo saborean, quedan fascinados por el alimento y no quieren dejar de comerlo.


Nuestro rechazo es prácticamente un instinto natural de protección.


Esto ocurre en cada situación nueva para nosotros.


Los seres humanos siempre buscamos lo conocido, pues de cierta forma nos está dando seguridad.


Es por esta razón que has visto muchas personas a tu alrededor quejarse de sus vidas, pero no se atreven ni por nada del mundo a dejar eso que los atormenta.


Esto implicaría salir de su zona de “confort”, es decir la parte que ya conocen y experimentar nuevas rutas.


Esto explicaría porque, así estemos sufriendo en una relación o un trabajo “cruel” seguimos allí, cual masoquista que disfruta de sus castigos.


A título personal llegué a conocer hace muchos años alguien que se podría decir que siempre tenía buena suerte.


Tenía la capacidad de cambiar de trabajo, de ciudad, incluso de estilo de vida a su antojo.


A la mayoría nos cuesta hasta decidir sobre donde vamos a comprar el pan para el desayuno.


Pero esta persona se notaba que, con solo pensarlo, las cosas le salían como por arte de magia a su favor.


Lamentablemente tenía un problema y era la predisposición hacia las cosas.


Donde quiera que iba, tenía la idea preconcebida que sus futuros jefes eran unos explotadores.


Y que solo se aprovecharían de sus capacidades para ellos seguir subiendo en la escala de la riqueza.


Esta persona padecía de otra curiosidad y era la falta de diálogo hacia sus “castigadores”.


Podría imaginarse los peores escenarios, pero jamás se atrevía a decirle a sus jefes que era lo que le gustaba y que era lo que no le gustaba realizar.


Finalmente, por esta falta de diálogo terminaba haciendo labores que no le correspondían y odiando no solo su trabajo sino a las personas con las que interactuaba en este.


Debido a su “buena suerte” se proponía a cambiar de ambiente laboral en otro trabajo y pues como sabemos lo conseguía casi de inmediato.


¿Y adivina qué situación conocida volvía a vivir esta persona?


En conclusión, terminaba haciendo las cosas de mala gana y siempre buscaba la primera oportunidad para renunciar y cambiar de trabajo para repetir de nuevo este ciclo.


Esto no solo se ve en lo laboral.


También he conocido casos donde personas salen escapando de la falta de oportunidades en su ciudad o país para llegar a hacer lo mismo que pudieron hacer en su localidad.


La diferencia está en que gastaron más dinero para desplazarse, pero igual les tocó vivir en otra localidad lo que no quisieron hacer en la propia.


¿Quiere decir esto que es malo irme de donde estoy para buscar nuevas oportunidades?


Para nada, el problema está en que no necesariamente vas a vivenciar nuevas cosas si te van con la misma mentalidad.


Por ejemplo, ¿por qué una persona sale de un trabajo en el cual sintió bullying o maltrato laboral para seguir en otro bajo las mismas condiciones?


Es bastante “curioso” pero en el nuevo trabajo siempre se va a encontrar con nuevos abusadores labores.


Esto se debe a que ocurrió un cambio de lugar, pero faltó cambiar lo más importante que fueron nuestras emociones e ideas preconcebidas.


Inconscientemente comenzamos a realizar acciones orientadas a lograr acciones de terceros.


Recuerda lo que vimos anteriormente sobre las creencias.


Nuestro ego, con tal de tener la razón, de estar en lo cierto, hace uso de nuestro poder interior para cumplir con nuestra “verdad”.


Así que quiero animarte, mediante esta información, a cambiar no solo de estilo de vida, sino de emociones e ideas.


Nunca permitas cambios en tu vida a medias, pues tu cerebro siempre regresará a lo conocido con el fin de protegerte.

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Ingeniero de Sistemas e Investigador del Pensamiento Humano y las emociones, y como estas influyen en las decisiones que tomamos cada segundo para tener éxito o fracaso.

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