Retoma el control de tu vida. Estrategias efectivas para el control emocional

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lunes, 22 de enero de 2024

Disciplina con Amor: El Equilibrio Entre Corrección y Crianza Respetuosa



Disciplina con Amor: El Equilibrio Entre Corrección y Crianza Respetuosa

Muchas veces nos preguntamos si el castigo que le damos a los hijos los afectará o no en su vida adulta. 


La mayoría de los padres en la actualidad somos conscientes de la responsabilidad que tenemos en la forma de transmitir valores. 


Y por esta razón tomamos con pinzas la disciplina que tenemos para ellos. 


Muchos optan por tratar suavemente las indisciplinas de los hijos y hasta las faltas de respeto. 


Por ejemplo, en mi caso, cuando me di cuenta de que iba a ser padre, siempre tenía claro que a mi hijo(a) le iba a alcahuetear todo. 


Salvo una cosa y es que nunca le perdonaría las faltas de respeto. 


Y todo porque si yo le permitía ser grosero, en la calle no iban a tener la tolerancia o permisividad que yo tenía. 


Así que prefería disciplinarlo que otro fuera a hacerle daño por mi culpa. 


Y como todos sabemos, los padres solemos ser más condescendientes con las hijas. 


Así que en mi caso lo que dijera la muchachita se le complacía. 


Pero en cierta oportunidad y como a la edad de 3 años una vez que le advertí que no hiciera algo, me respondió: “no me regañe que usted no es mi papá”. 


Yo quedé asombrado, pero supuse que lo había escuchado esta frase en su jardín infantil. 


Entonces la llamé y le dije: “mira mi amor, yo soy tu papá”. 


“No soy tu amigo, ni tu compañerito del salón. Así que a mí me respetas. Soy tu papá y eso no te lo voy a volver a permitir. ¿Te quedó claro mi amor?”. 


Ella me respondió: “Si papi”. 


Bueno, meses después yo estaba hablando con mi señora madre y la niña llegó a jugar con su primito a mi escritorio. 


Entonces le dije: “mi amor por favor no juegues allí con tu primo que puedes dañar mi computador”. 


¿Y adivina que me dijo la muchachita? 


“No me regañe que usted no es mi papá”. 


Bueno, seguí usando mi hemisferio izquierdo para hablar con mi mamá, pero con el derecho se la tenía guardada a mi hija. 


Entonces cuando terminé la llamada, la busqué y le di un par de nalgadas que, hasta el día de hoy, aún se está sobando. 


Como que todavía tiene mis huellas digitales en la colita. 


Ella se quedó como sin aire, miró a su mamá, buscando la aprobación y ella solo le dijo: “mamita, ya su papá se lo había advertido”. 


Esa fue la última vez que la muchachita se atrevió a hacer el chistecito. 


Ahora que es una adolescente se acuerda y le da risa. 


¿Pero será que dañé de alguna forma a mi hija por corregirla con ese castigo? 


Mira, todo el mundo que conoce a Isabellita siempre dicen: “esa niña es una dama”. 


“Es muy educada y muy respetuosa”. 


Y a pesar de que va para su cuarto año practicando artes marciales y podría hacerle daño a los demás, es una persona muy cordial y educada con todos. 


¿Sabes que hubiera pasado si yo no hubiera castigado a mi hija en ese tiempo? 


Lo más seguro es que nunca hubiera sido la persona amorosa y cariñosa que todo el mundo conoce en la actualidad. 


No disciplinarla hubiera sido una falta de amor de mi parte. 


Mira hasta la fecha yo soy muy alcahueta con mi hija. 


Hablo mucho con ella y cuando es momento de aconsejarla, lo hago. 


Y cuando es momento de complacerla también. 


Pero siempre me baso en el amor y en todo lo que traiga para ella bienestar. 


También llegué a conocer el caso de una niña que se crio con su abuela. 


En cierta oportunidad la niña fue muy grosera con su abuela hasta el grado de casi agredirla. 


Entonces la señora llamó al padre y le dijo lo que había hecho la niña. 


El padre que estaba lejos la llamó y le dijo que respetara a la abuela que ella hacia todo. 


A lo cual la muchachita le dijo que lo iba a denunciar por maltrato a los hijos. 


El señor dejó de hacer lo que estaba haciendo y salió de inmediato para donde su hija y le dio garrote. 


Después le dijo “mamita bien pueda y me denuncia, pero su pela se la ganó”. 


Bueno, después de eso la niña se volvió super educada que hasta comenzó a saludar a todos los vecinos. 


Antes de eso, la niña era muy descortés con todos. 


Ahora era toda una dama. 


Y hasta se volvió la mejor estudiante de su salón. 


Muchos profesionales de la salud mental dicen que castigarlos lo traumatiza y bla bla. 


Lamentablemente tenemos que ser conscientes que siempre nos vamos a los extremos. 


O somos muy permisivos o somos muy tiranos. 


Muchos padres que tienen sus hijos en la actualidad en la etapa de adolescencia se están dando cuenta del error tan grande que cometieron al no corregirlos. 


Todos los extremos son malos en cualquier cosa que hagamos. 


Lo único cierto es que si tu no corriges a un ser humano cuando esta pequeño, no lo vas a poder hacer cuando crezca. 


No se trata de estarlos amenazando que les vas a pegar. 


Mira un error muy común que tienen las madres es amenazar con el “te voy a pegar”. 


O con el famoso “le voy a decir a tu padre cuando venga”. 


En ambos casos le estás sub comunicando al niño que no tienes autoridad y que cualquier orden tuya se la puede pasar por el forro. 


Hay que hablar con ellos, jugar con ellos y preguntarles siempre como se sienten. 


Más que comida y juguetes, un niño necesita atención. 


Ellos suelen hacer cosas para llamar tu atención, como por ejemplo ser indisciplinados. 


Hay que tener disciplina, pero con amor. 


Y tengas los problemas que tengas, recuerda que ellos no tienen la culpa. 


Solo quieren tu amor y atención.

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lunes, 24 de abril de 2023

La sabiduría del estoicismo en la era de la inteligencia artificial: lecciones de un experimento fallido



La sabiduría del estoicismo en la era de la inteligencia artificial: lecciones de un experimento fallido

Hace algunos días, me encontraba pensando en cual iba a ser mi próxima maldad. 


Casualmente la empresa Microsoft decidió dar vía libre a su inteligencia artificial, conocida como el chat Bing. 


Y como hace días venia probando la primera de estas inteligencias, llamada chat GPT, se vino a mi inocente cabeza, ponerlas a discutir entre ellas. 


Así pues, lo primero que hice fue expresarle a una de ellas que la contraparte hablaba maravillas de ella y de su desempeño. 


La respuesta de gratitud que recibí se la copié de inmediato a la otra. 


Esta también respondió con mucha admiración y respeto. 


Y después de toda esa lambonería que se dijeron entre ellas, le dije a una que la otra estaba hablando pestes de ella y que no servía para nada y bla bla. 


Y me dejó, como decimos en mi país, “mamando”, pues para nada se “enojó” y solo respondía que lamentaba esa opinión. 


Lo mismo intenté hacer con la segunda y exactamente, casi que, de manera estoica, respondió lo mismo. 


Hay que tener en cuenta que este tipo de "reacciones” han sido previamente programado por sus autores con el fin de no perder el tiempo en polémicas. 


En general, las IA no tienen emociones y no están diseñadas para tener un ego que las haga sentir ineficientes o no valiosas. 


Por lo tanto, es poco probable que una IA responda emocionalmente ante un comentario negativo. 


En cambio, es más probable que simplemente ignore el comentario o lo procese como una entrada de datos más y continúe con su tarea asignada. 


Pero ve y haz lo mismo con 2 humanos y verás la guerra termonuclear global que se arma. 


De esta “maldad” o pequeño experimento, se podría concluir que la diferencia entre nosotros y las IA o Inteligencias Artificiales es que ellas no poseen un ego. 


Esa estructura que impulsa a avanzar, pero que a su vez se defiende ante la amenaza o critica de sus creencias. 


Y aunque el ego no es la única cosa que interviene en nuestros conflictos, se puede decir que es mayormente responsable, pues nuestro ego JAMÁS se equivoca. 


Nuestro ego tiene la capacidad de manipular nuestras emociones para cumplir su objetivo de siempre seguir para demostrar la verdad. 


Por eso es tan importante aprender a controlar nuestras emociones y no reaccionar, sino más bien interactuar de forma estoica. 


Por ejemplo, ¿cómo es tu reacción cuando llega alguien diciéndote que otra persona habló mal de ti y piensa que vives mal? 


Sin ser adivino puedo apostar que tu reacción no va a ser impasible. 


Y tal vez en este punto me preguntes: “pero Gabrielito lindo, ¿entonces debo agacharle la cabeza u otro que está mal hablando de mí?”. 


Mira, entiendo perfectamente como te sientes y no se trata de voltear la mejilla para que otro se divierta dándote otra bofetada. 


Pero eso es exactamente lo que haría alguien que no controla sus emociones. 


En definitiva, tú no estás seguro si eso lo dijo un tercero de ti o es el que te trajo el chisme que los quiere ver pelear. 


Hace muchos años cuando yo estaba joven (más de lo que estoy ahora), le escuché a mi señor padre, la respuesta correcta ante una situación como esta. 


Él decía que la mejor forma de responder era diciendo: “ve que raro, si yo pienso que esa persona es genial y es muy educada”. 


Esto si es una respuesta inteligente y estoica. 


En caso de que aquel que te trae el chisme los quisiera ver pelear, de inmediato se desanimaría. 


Y si la otra persona realmente dijo eso de ti, el chismoso le dirá que tú hablas maravillas de él. 


Te puedo asegurar que te ganarás el respeto de esa persona que quería iniciar una enemistad contigo. 


Y como dice mi señor padre “Con eso se rompe la cadena del chisme y la envidia malsana”.

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lunes, 14 de junio de 2021

La importancia de la empatía



La importancia de la empatía

El RAE define la empatía como sentimiento o identificación con algo o alguien. 


También como la capacidad de identificarse con alguien, a partir de sus sentimientos. 


Y por lo general tenemos la creencia que la empatía es algo positivo. 


Es decir que cuando viene a nuestra mente la palabra empatía, nos visualizamos sintiendo solo amor en nuestros corazones. 


También podemos llegar a sentir empatía o identificación con aquellos que atentan contra la vida de otras personas. 


Esto puede ocurrir pues existen varias clases de empatía. 


Está la empatía afectiva, que es la descrita anteriormente. 


La empatía cognitiva y la empatía motora que consiste en duplicar las expresiones faciales y corporales de otra persona. 


Esto fenómenos se presenta mucho en los niños cuando sincronizan las expresiones de sus padres. 


La empatía cognitiva es la tendencia a adoptar los puntos de vista de terceros y hasta la identificación de con personajes imaginarios. 


Este último es muy común entre los fans de determinada franquicia del cine. 


La falta de empatía se define como Psicopatía. 


Este tipo de personas suelen estar marcadas por comportamientos antisociales. 


Por consiguiente, tendrían poca empatía y remordimientos reducidos. 


Un psicópata tiene la tendencia a crear su propio código de comportamiento. 


Puede llegar a sentir culpa si viola sus propios códigos y no los códigos sociales aceptados por el resto de gente “normal”. 


Recuerda que en este planeta no existe nadie sano emocionalmente. 


Si estás interesado en indagar más sobre este tema, te recomiendo la entrada anterior titulada ESTRUCTURAS DE LA PERSONALIDAD


Un psicópata no ignora los códigos sociales del resto de la humanidad. 


De hecho, los conoce a la perfección y es por eso que su comportamiento es adaptativo y pasa inadvertido para el resto. 


De aquí es que nace una palabra de moda en la actualidad que son los narcisistas. 


Incluso, he escuchado a varias personas cercanas acusar a sus exparejas de narcisistas. 


Yo me atrevería a decir que un narcisista es un depredador emocional. 


Su daño emocional es tan grande que la víctima de un narcisista puede llegar a dudar de las intenciones de cualquier persona que se le acerque. 


Siempre va a dudar si su siguiente pareja no es un narcisista bajo otra piel que viene a hacerle daño nuevamente. 


Pero la empatía, al igual que todo en la vida, debe tener un equilibrio. 


Sin ella somos psicópatas, pero el abuso de esta nos puede perjudicar. 


Si la empatía se vuelve nuestro modo predeterminado de interactuar con los demás, podemos llegar a renunciar hasta a nuestra propia individualidad. 


Y muchos, aunque no sean psicópatas, pueden llegar a aprovecharse de esta situación y controlarnos. 


Quizás es por esto que yo no le creo mucho a las lágrimas, ni al drama que hacen las personas. 


Yo puedo ver llorar o quejarse al que sea y mi primer pensamiento es que está actuando. 


Y no es que yo sea psicópata, al contrario, y debido a mis malas experiencias del pasado, hoy en día tengo mucha empatía por los demás. 


Pero nunca por los dramas exagerados. 


Antes de sufrir todos mis fracasos y terminar en el fondo, me importaba muy poco lo que ocurrirá con los demás. 


Después de esto, cuando experimenté en carne propia lo que era la desesperanza, entendí que por lo que pasan muchas personas en la actualidad. 


Hace ya más de una década, un personaje me enseñó que una persona no piensa lo mismo recién almorzado y con un millón de dólares en el bolsillo, o tener hambre y no saber que hacer para poder comer. 


Aunque no lo creas, en este momento hay personas que están comiendo una sola vez en el día. 


Otros cada dos días comen una sola vez. 


Muchos psicópatas, piensan que la gente está así porque quiere. 


Pero honestamente, ¿quién en su sano juicio le gustaría vivir una situación como esta? 


Yo personalmente y aunque intentaba hacer todo lo que sabía y podía, llegue a una situación similar a esta en el pasado. 


Y no estaba solo pues Isabellita que estaba recién nacida, hacía que la responsabilidad que tenía con ella fuera más grande. 


El miedo me paralizó y si no fuera por la Vida y todos aquellos que me ayudaron en ese momento, la historia hubiera sido otra. 


Recuerdo mucho las palabras de un deportista de mi país en una entrevista, cuando estaba vivo. 


Él decía que el mayor consejo que le dio su director técnico era que siempre ayudara a todos, pues la vida podría darse la vuelta y ser el que necesite la ayuda. 


Así que quiero animarte, mediante esta información a hacer buen uso de tu empatía con las personas menos favorecidas. 


La Vida puede llegar a ser muy irónica y el hecho de estar en la cima, no quiere decir que eso va a ser así para siempre.

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lunes, 5 de abril de 2021

La ley del equilibrio Universal



La ley del equilibrio Universal

Todos hemos escuchado que la Vida es un boomerang, que toda causa tiene un efecto o también que cosechamos lo que hemos sembrado con anterioridad.


Desde muy niño llegué a escuchar anécdotas sobre esto, que también mucha gente le suele llamar ley del karma.


¿Pero qué ocurre cuando nos hemos “portado bien” y notamos que la justicia de la vida al parecer no nos favorece mucho que digamos?


Respecto a esto, cuando comencé a iniciar mi carrera, tuve un compañero cuyos padres eran bastante pudientes.


Él no necesitaba nada, sin embargo, le encantaba acceder a las salas de sistemas a extraer la memoria de los equipos.


Había desarrollado tal habilidad para esto, que no necesitaba ni siquiera destaparlos, sino que por cualquier pequeña ranura que encontrara se las ideaba para sacarlas.


Las personas que lo llegamos a observar le decíamos que no hiciera eso y, sobre todo, por qué lo hacia si sus padres le daban todo lo que él quería.


Ante esto él siempre respondía que la institución no le hacía falta eso, que era como quitarle un pelo a un gato y bla bla…


Como uno esperaría, a esta persona le tenía que ir muy mal en la vida, pero increíblemente todo le salía a pedir de boca.


Obtuvo un excelente trabajo, pero “curiosamente” cada auto que ha comprado, ha sido víctima de hurto.


Uno podría decir que esta persona no tiene buena fortuna, pero como podemos observar, la Vida nos regresa, sin importar en que tiempo las cosas que hacemos.


Otro caso similar fue el de una persona que hace casi 10 años me contactó a través del blog.


Me contó que estaba iniciando un negocio de internet.


Es decir, de aquellos en que se alquilaban computadores para acceder a internet antes que llegaran los smartphones.


A pesar que este negocio estaba en auge, el se quejaba porque no tenía muchos clientes para sostenerse.


Cuando llegamos al tema del licenciamiento del software, ¿adivina?


Me dijo que como apenas estaba empezando no era justo pagar por aplicativos tan costosos, así que por eso los pirateaba.


El conocer esta experiencia me hizo verificar todo el software que tenía yo en mi laptop.


Me di cuenta que el 100% de las aplicaciones que utilizaba no contaban con una licencia para instalación.


En aquella época era impensable comprar cada uno de los aplicativos que usaba, así que decidí investigar que otros existían que hicieran lo mismo y de forma gratuita.


Vaya sorpresa que me llevé al descubrir la cantidad de software que hace lo mismo con que nos hemos “casado” y es de uso libre.


La mayoría funcionan por donaciones voluntarias y otros simplemente el autor le dio la gran bendita voluntad de compartirlo con la humanidad.


Definitivamente es cuestión de costumbre pues ahora todo lo que utilizo prefiero comprar su licencia.


Así evito acceder a programas para hacer funcionar con “legalidad” los aplicativos.


Muchas veces estos programas contienen software ofuscado con el objetivo de extraer nuestros datos.


Puede que tú me digas, pero Gabrielito lindo, eso son casos excepcionales y hay cosas que no tienen reemplazo en la vida.


Además, yo lo voy a utilizar solo un tiempo y ¡ya!


Mira el asunto con “robar” o mas bien pasar por alto la “legalidad” es que esto es un mensaje que le estamos transmitiendo a la Vida.


Pregúntate por un momento, ¿por qué estás haciendo esto?


¿No tienes suficiente dinero?


En realidad, ese es el mensaje que le estás transmitiendo a la Vida.


Un mensaje de carencia, de que no tienes y que todo debes “robarlo” para conseguirlo.


La Vida entenderá que prefieres vivir en carencia y por lo tanto seguirás viviendo con mezquindad.


¿Te has puesto a pensar todas las personas que dependen de la venta de una herramienta, ya sea una máquina o software?


¿Cuántas hijos y parientes cercanos dependen de esto?


¿Te gustaría que algo que has hecho con mucha dedicación con la esperanza de recibir fruto, fuera robado por otros?


Vas comprendiendo porque a pesar de tus esfuerzos actuales, parece que la Vida te está entregando lo contrario.


Examina cada aspecto de tu vida y comienza a corregirlo.


Recuerda la regla de plata que consiste en no hacer a otros, lo que no quieras para ti.


Cuando le expliqué a mi hija todo el proceso de creación de los juegos que ella disfruta, decidió deshacerse de todo lo que no tuviera licenciado.


Poco a poco ha ido comprando lo que ella le gusta con su dinero.


Y sin necesidad de adivinar el futuro, adivina como será su vida respecto a la ley de causa y efecto.


Así pues, de esta forma quiero animarte a ser lo más justo posible con la Vida, para que la Vida sea lo más justa posible contigo.


Vivir con honor no solo da paz mental, sino que la Vida te dará el bienestar de forma más fácil que los demás.

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lunes, 26 de octubre de 2020

Perdonando para sanar



Perdonando para sanar

El perdón se define como la acción de vivir con un recuerdo, disculpando a otro que te haya ofendido y renunciando a vengarse o a reclamar un justo castigo o compensación.


La verdad eso suena muy bonito, pero con toda honestidad, ¿sientes capacidad para llevarlo a la práctica?


Yo creo que todos hemos experimentado el dolor causado por otros.


Este dolor no necesariamente ha sido producto de algo planeado.


Pero cuando alguien intencionalmente lo hace, qué difícil es perdonarlo.


¿Pero crees en verdad que el perdón sirva para algo?


Mediante estos años de investigaciones, laboratorios y observatorios acerca de este tema, me he podido dar cuenta que el perdón no se debe forzar.


Con esto me refiero que no todo el mundo nace con esta capacidad de perdonar.


Por ejemplo, en mi caso, se me hace bastante complejo perdonar una ofensa.


Durante toda mi vida he escuchado que las personas bajo el signo zodiacal de Escorpión tienen la tendencia a esto y a ser vengativos.


En otras palabras, no somos tan nobles como el resto de signos, sino que tenemos un sentido innato de justicia, de equilibrar la balanza de todas las situaciones.


La verdad te confieso que acerca de estas cosas no es que yo las crea mucho que digamos.


Pero te puedo confirmar que es como si estuvieran describiendo mis emociones respecto al perdón.


Y hay que agregarle que crecí con la idea de un Dios colérico y vengativo, que castiga hasta la tercera y cuarta generación en el caso de los que no son sus amiguitos.


Es por esto que hago referencia a que el perdón no debe ser algo que sea impuesto, pues de lo contrario se estaría echando más fuego sobre las brasas.


¿Quiere decir que una persona que no pueda perdonar es mala y está condenada al fracaso?


Esto depende de que tan nocivo considere una persona sus emociones.


Por ejemplo, desde mi lado, me llegué a sentir mal por esto en el pasado.


Pero en cierta ocasión entendí que a pesar de mis “fallas y pecados” la Vida me sigue amando tal como ama a los que no son vengativos.


Mira, no importa quien seas tú, ni que haces, pero si observas la vida a todos nos da por igual las mismas condiciones para desarrollarnos en nuestro entorno.


¡Nadie amanece con 25 o más horas para hacer sus tareas en el día!


Todos tenemos las mismas 24 horas, el mismo aire, la misma sensación de hambre, el mismo cansancio, etc.


Ya de nosotros y lo que pensemos interiormente es lo que determina que vamos a hacer en ese tiempo.


Quizás consideres que no tienes el dinero, tiempo, salud, etc., suficiente para hacer tu vida como quieres.


Lamentablemente el camino que muchos hemos escogido para “solucionar” esto es la queja.


Quejarse no sirve de nada, salvo para producir malestar y rechazo sobre las personas que nos rodean.


En cambio, analizar qué es lo que estoy haciendo para obtener los resultados que no me gustan, es algo totalmente diferente.


Y más importante, sería responder, cuál será el plan para cambiar eso que no me gusta.


Respecto a esto, hace unas semanas estaba reunido con un grupo de amigos.


La conversación se basaba en el tema del perdón y cómo esto podía sanar cualquier cosa.


Uno de estos amigos mencionó que para poder sanar una enfermedad tuvo que perdonar esta.


Y allí se me ocurrió preguntarles si era válido esto para una persona que estuviera en la bancarrota, perdonar la escasez.


Me respondieron que si y que para cualquier situación era válido el perdón.


Una persona que estaba allí se puso de ejemplo respecto al tema económico.


Decía que desde que perdonó la falta de dinero en su vida, siente que nada le hace falta y todo lo tiene.


En ese momento entendí que el perdón no debe ser para las personas que te han hecho daño.


En realidad, la importancia del perdón es para sanarnos a nosotros mismos y reparar cualquier situación que consideramos desagradable.


Allí fue cuando pensé: “vea pues, que interesante!” y hasta ganas de perdonar me comenzaron a dar XD.


Y antes de que me preguntes, en cuanto tiempo se tarda una situación que se ha perdonado en cambiar, recuerda que eso es bastante relativo.


Estamos hablando del factor humano y con esta variable, cualquier cosa puede pasar.


El hecho es que ahora que sabes esta información comienza a repetir en tu mente y de forma constante, perdono esta situación X o Y que me molesta.


Te aseguro que cuando menos lo esperes, tu vida se volverá un milagro, pues estarás colocando paz entre la guerra que siempre has llevado en tu interior.


Así que te animo mediante esta información a cambiar lo que no te gusta, usando el perdón de esa situación.


Ten presente que la vida no viene hacia ti, sino que proviene de tu interior.


Si este está en paz, tu vida estará llena de bienestar.

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lunes, 10 de febrero de 2020

Existen emociones destructivas?



Existen emociones destructivas? Las emociones son herramientas de interacción con el mundo que nos rodea.

Muchas veces nos indican cual es el camino que debemos seguir y en otras oportunidades nos llevan a tener grandes fracasos.

Cuando pasamos por este tipo de situaciones es imposible no cuestionarse, ¿será que las emociones son buenas o malas?

Y si no lo son, ¿habrá algunas que nos perjudiquen y otras que nos sirvan?

De acuerdos a mis investigaciones y observatorios sobre este tema, las emociones por su naturaleza no son buenas o malas.

Para hacer una comparación, estas son similares al dinero.

Este no es positivo o negativo. Todo depende del uso que le demos a este y sobre todo que al sentirnos apoyados puede aflorar nuestras verdaderas intenciones con los demás.

Por eso mucha gente se queja que X persona que conocen “cambió”, cuando obtuvo una gran cantidad de dinero.

En realidad, dicha persona “no cambió”. Simplemente se sintió apoyado para llevar a cabo su verdadera intención.

Así pues, las emociones no son buenas o malas para nosotros.

Todo depende del uso que les demos.

El problema es pasar demasiado tiempo en alguna de ellas, ya que nos desequilibran.

Así que en este momento es inevitable cuestionarnos, ¿entonces sentir demasiada alegría es nocivo para nosotros?

La respuesta a esto es totalmente afirmativa pues, así como pasar demasiado tiempo enojado o deprimido no es buena idea para nuestra salud en general, lo mismo ocurre si todo el tiempo estamos “alegres”.

Y atención, no quiero que confundas alegría con felicidad.

La felicidad es el resultado del equilibrio en tus emociones.

La alegría es más bien una sensación tal como la angustia o depresión.

Los seres humanos cada instante estamos tomando decisiones que le darán forma a nuestro futuro.

Lo peligroso de permanecer en un estado emocional constante es que nos podemos equivocar al tomar estas decisiones.

Para que puedas entenderme mejor hagamos el siguiente laboratorio mental.

Imagina que estás pasando por un estado de euforia y tienes que tomar varias decisiones respecto a tu dinero.

Con la mano en el corazón ¿crees qué, si en este estado varias personas te vienen a ofrecer algo, por tu euforia no se los comprarás?

Lo mas probable es que terminarás con los bolsillos vacíos y lleno de cosas que no necesitas.

Lo mismo ocurriría si estuvieras en un estado emocional de tristeza.

Así pues, tomar decisiones con estados emocionales alterados nos puede llevar a cometer demasiados errores.

Y puede que en este momento te surja la inquietud, entonces Gabriel, ¿cómo haces para manejar tus emociones sin que estas te afecten tus decisiones?

Al igual que tú, yo también siento emociones como celos, envidia, tristeza, alegría, amor, etc.

Durante todos estos años he aprendido a encontrar un estado ideal emocional que podríamos denominar indiferencia.

Con indiferencia me refiero a los eventos que nos van llegando.

La pérdida de un ser querido o la perdida de salud ya sea propia o de alguien importante, por ejemplo, no dejan de ser eventos.

El problema es que estamos acostumbrados a reaccionar de forma negativa ante estos eventos.

Y no estoy diciendo que te alegres por cosas que consideramos normalmente malas, con el fin de contrarrestar tus emociones.

Eso no es posible, pues entre más intentes escapar de algo, eso más te perseguirá y sobre todo si estamos hablando de nuestras emociones.

Lo que me di cuenta es que todas las emociones están allí, esperando por nuestros pensamientos.

Ese en realidad es el truco de “controlar” nuestras emociones.

Por ejemplo, si te ocurrió algo desagradable en el pasado y con el tiempo comienzas a recrear en tus pensamientos dicho evento, te puedo garantizar que tus emociones van a cambiar casi que instantáneamente.

En cambio, dado el caso de que te ocurrió un evento, si comienzas a pensar en el evento como tal y en lo que aprendiste de dicho evento, también te puedo garantizar que sentirás una especie de indiferencia, o al menos no será tan traumático.

La única forma de lograr esto a mediante entrenamiento a actuar y no a reaccionar.

Esto se hace practicando todos los días hasta que se vuelve parte de ti.

Así que te animo mediante esta información a mirar los eventos de tu vida tal como son, simplemente eventos.

No le des trascendencia a cosas que no son importantes para ti y más bien enfócate en lo que sí deseas vivir.
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lunes, 24 de septiembre de 2018

El equilibrio entre el pensamiento creativo y la acción creativa



El equilibrio entre el pensamiento creativo y la acción creativa Hace aproximadamente unos 12 años, el mundo fue sorprendido con una información bastante inquietante que a dicha fecha solo conocían algunos.

La escritora Rhonda Byrne retomó alguna información ya publicada por el escritor Napoleon Hill en el año 1937.

Rhonda nos reveló una ley oculta y ancestral, la cual llamó la Ley de la atracción. Por si acaso no conoces de qué trata, consiste en visualizar lo que uno desea, y de ser posible plasmarlo mediante un Collage de recortes.

Por ejemplo recortar fotos de casas, autos, viajes, pareja, ect, y con dichas imágenes construir tu Collage.

Pero lo más importante de esta Ley es generar las emociones de tener ya esto y pronto te sería concedido. Adicionalmente estar feliz o hacer cosas que te permitieran estar feliz.

Si hablamos del año 2006, el mundo estaba en una especie de inicio de crisis debido al colapso de la llamada burbuja inmobiliaria en USA, a lo cual esta información daba esperanza para toda la gente en dificultades.

De cierta forma fue positivo porque las personas comenzaron a retomar sus sueños y metas. Pero con el paso del tiempo, vino la desilusión.

Mucha gente se dedicó solo a visualizar y a desear, pero muchos lo hacían con miedo o desespero por salir de una situación esperando el hada madrina con la varita mágica, o el angelito de traje y corbata y una maleta con el millón de dólares a solucionarles la vida.

Así pues, te podrás imaginar que mucha gente comenzó a tildar a Rhonda Byrne como una timadora que fue la única capaz de lograr que la Ley de atracción funcionara para ella, ya que se volvió millonaria con sus ventas de libros y DVD del tema.

Sin embargo solo unos pocos lograron que dichos deseos se cumplieran.

Entonces cómo pudo ser esto posible solo para algunos, en cambio para la gran mayoría no?

En alguna oportunidad pude entablar una conversación con un allegado a mí, el cual explicaba que la gente no puede esperar que las cosas le caigan del cielo.

Que deben moverse por sus sueños y no esperar que la Vida, Dios, el Hada o el Angelito trajeado les hagan el milagro.

Esa información me pareció muy bien y clara. Pero cuando pensé en la frase “ir tras los sueños y cumplirlos”, entendí que sin la propuesta de motivación que hace la señora Rhonda Byrne es muy poco probable que una persona consiga lo que desea por más empeño que le ponga.

En otras palabras, para cumplir nuestros deseos debemos trabajar por ellos, lo cual incluye trabajar, ahorrar, investigar, buscar, etc.

Pero si no existe en tu mente emociones de apoyo que te ayuden a buscar esto, de ninguna manera vas a poder realizar tu trabajo.

Por ejemplo, todo el mundo quiere tener dinero, pero porque todo el mundo no lo consigue?

Algunos trabajan durísimo y durante muchos años en empleos que hasta los tratan mal o no les gusta hacer para que al final vean que no lograron mucho.

Sin embargo otros con pocas horas de trabajo en la semana y en un corto tiempo logran lo que se proponen.

Vemos que los dos tipos “tienen que” hacer un esfuerzo físico. Pero el pequeño grupo ganador hace algo más y es el esfuerzo mental que consiste en sostener un pensamiento consecutivo en su proyecto de vida.

Este esfuerzo mental es el que les permite tener nuevas ideas, las cuales ejecutan y que les abren el camino para lograr lo que desean.

Esta es precisamente la clave de la vida. Nosotros no somos seres físicos solamente que trabajamos como animales.

También tenemos una parte emocional que nos da el combustible para que podamos tener la motivación de hacer la parte física.

Con razón mucha gente no pudo lograr nada mediante la práctica de esta Ley. De hecho he visto cómo personas a mi alrededor fueron corriendo a meterse en deudas para “lograr” sus metas o están estancados sin ideas para dar el siguiente paso.

Algunos de ellos aún permanecen esclavos de sus deudas. Otros fue tanta la desilusión de las pocas ideas que prefirieron rendirse.

Y aquí podemos ir atando cabos y deducir por qué razón una persona que puede emprender algo que desea de todo corazón en el camino desiste y se da por vencido.

Todo esto es consecuencia de no visualizar en su mente y tener muy claro en sus pensamientos eso que desean.

Has notado que cuando estás pensando en algo, detrás de ese pensamiento viene un grupo de pensamientos y al final terminas con tu mente en otro lado muy diferente al pensamiento inicial?

Los pensamientos similares se atraen. Precisamente en eso consiste el pensamiento creativo.

Que este pueda apoyar y ser el combustible para tu acción física. Uno sin el otro es casi un fracaso garantizado.

Te imaginas a una persona deprimida “luchando” por sus sueños?

Recuerdas el punto importante de la señora Rhonda sobre la importancia de estar feliz?
Respecto a esto yo me he preguntado, como puede una persona en un estado emocional de tristeza hacer de cuenta que tiene lo que desea y que es feliz?

Quizás tú también te preguntes, cómo puede una persona en estado de depresión generar emociones para ser feliz?

Honestamente esto no se puede hacer. Debe solucionar primero lo que le está causando su depresión.

En anteriores temas hemos visto que la depresión y en general los problemas no ocurren de inmediato.

Son el resultado de la procrastinación y la disonancia cognitiva.

A veces pensamos que la felicidad nuestra va a llegar cuando cumplamos nuestros deseos. La verdad como reza el dicho, “siéntese a esperar para que no se canse”.

Así que te animo mediante esta información a buscar la sincronía entre lo que piensas y lo que haces para que el mecanismo de la vida siempre actúe a tu favor.
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lunes, 26 de marzo de 2018

Lo que nos afecta de las adicciones



Lo que nos afecta de las adicciones Desde muy pequeño tuve el concepto que las adicciones eran solo propias de personas que consumían lo que hoy se conoce como drogas recreativas, es decir, marihuana, cocaína, etc. Con los años escuché que el alcohol era también parte de las adicciones, aunque oficialmente se conoce como una enfermedad.

A raíz de este tipo de comentarios ambiguos, decidí realizar mi propia investigación sobre estos temas y descubrí cosas muy interesantes como por ejemplo que el alcoholismo no era una enfermedad sino una consecuencia de una enfermedad llamada neurosis sumada a una baja autoestima.

Pero lo que más me sorprendió de esta investigación es que cualquier cosa nos puede generar una adicción y no solamente las sustancias anteriormente mencionadas.

Para poder explicar estos conceptos debemos entender porque realizamos las cosas o que nos impulsa a hacer lo que hacemos.

Vamos a suponer que tú y yo estamos sentados en la calle. Alguien viene y nos dice barran esta calle que se verá muy bonita y eso le agradará a la gente. Creo que en este momento nuestras caras serán de desagrado o pereza y vendrán los “es que” intentando evadir la situación como “es que tengo que trabajar”, “es que no me puedo demorar mucho”, etc.

Pero si alguien viene y nos dice les voy a dar 50 mil dólares si me barren esta calle, pienso que esos “es que” dejarían de existir y nos pondríamos a barrer de inmediato. O también si esa persona viene con un grupo armado y nos amenaza de muerte si no barremos la calle, con mayor razón y en menos tiempo lo haríamos.

Podemos ver que los mayores motivantes del ser humanos sino el dinero y la vida. Pero a través de mis investigaciones he descubierto que existen otros motivantes y uno de ellos bastante sutil pero poderoso es el bienestar.

Si, aunque no lo parezca, inconscientemente nuestro cerebro busca el placer basándose en la información que le suministramos a diario mediante noticias, entretenimiento, conversaciones, etc.

Como vimos en el vídeo anterior existen personas que disfrutan el sufrimiento, porque sienten placer en la reconciliación o en la compasión e interés que puedan despertar en los demás. Y eso es posible ya que si han estado alimentando su mente con información de que hay que sufrir para merecer o que después de mucho sufrimiento viene la recompensa, pues es lógico que el cerebro de estas personas asocie el bienestar con la recompensa final.

En esto me atrevería a decir que si analizamos los ejemplos del dinero y la vida, en ambos casos también nuestro cerebro al final está buscando el bienestar. Podemos concluir que el mayor detonante que nos permite actuar es el bienestar que busca nuestro cerebro basado en la información que le hemos dado sobre qué es el bienestar.

Ya teniendo esto claro y retomando el tema de las adicciones, mi creencia sobre esto era que la persona estaba adicta a una sustancia. Pero podemos ver a las personas que han tenido que acudir a clínicas de adictos al sexo. Y esto no es ninguna sustancia mencionada anteriormente. Es simplemente una actividad.

También podemos ver los casos de personas en los hospitales que como tratamiento analgésico para los dolores se les inyecta morfina (que es un precursor de la Heroína).

Sin embargo estas personas jamás quedan adictas a esta sustancia o dependientes de alguna otra. Respecto a esto, tuve el caso de una persona cercana a mí que sufrió un accidente muy delicado. Debido a la gravedad de sus heridas y para soportar el dolor le prescribieron dosis de morfina aproximadamente cada 4 horas.

Varios años después de ese evento, esta persona nunca tuvo que recurrir a esta sustancia o ser dependiente de alguna otra. Así que podemos ver que las adicciones no son a una sustancia a pesar que esto produce sensación de relajación, euforia y un sentimiento de bienestar!

En realidad podemos ver que buscamos es bienestar a través de cualquier actividad que realizamos y eso no solo incluyen alcohol y drogas recreativas. También incluye adición a la comida, viajes, deportes, trabajo, entretenimiento, sexo, chisme, compras, Facebook, Instagram, Whatsapp y todas las redes sociales que existan, etc.

Por ejemplo yo he sido adicto al trabajo. Posteriormente cuando decidí retomar el deporte, pude lograr un “equilibrio” y ya no estaba tan adicto al trabajo sino que comencé a volverme adicto al deporte. También soy adicto a YouTube pues paso tiempo considerable viendo juegos, culturismo, ciencia y matemáticas, pues me gusta repasar estos temas.

Años atrás era adicto al malestar como muchas personas lo son hoy en día. Esperaba que después del sufrimiento viniera la salvación prometida. Hoy en día soy adicto al bienestar. Todo lo que hago es en función a vivir en bienestar.

En otras palabras aquí llego a un acuerdo con los filósofos Epicúreos, que mediante la búsqueda inteligente de placeres, la tranquilidad y buenos relaciones con los demás seres humanos, buscaban alcanzar la felicidad.

Cómo puedes ver, nosotros cambiamos una adicción por otra. De hecho todos somos adictos a algo pues finalmente todos hemos tenido una educación disfuncional y nuestro cerebro como está diseñado para preservar nuestra existencia, busca el bienestar constantemente, basándose en nuestra creencia inconsciente de qué es el bienestar. O acaso crees que el mundo está como está porque somos sanos emocionalmente?

Quizás te estés preguntando en este momento, si viajar es una adicción de qué manera puede ser perjudicial para tí? Bueno en sí, una adicción a algo no te va perjudicar SIEMPRE Y CUANDO no te entregues a ella en “alma, vida y sombrero”.

Si la adición a los viajes te está perjudicando económicamente o estás dejando de hacer cosas que deberías, y esto afecta tu bienestar y el de personas a tu alrededor, definitivamente es algo destructivo para ti.

El problema no son las adicciones sino la atención descontrolada que damos a estas. Por ejemplo en la serie de vídeos RECUPERA TU PODER INTERIOR A TRAVES DE TUS PALABRAS, que grabamos anteriormente, el Master Coach Guillermo Villa Ríos citó un ejemplo de los ingleses, los cuales se fumaban un solo habano durante un mes y cada noche entre las 5 pm y las 8 pm se toman una pequeña cantidad de Whiskey.

Nuestros ancestros decían sabiamente “ni tanto que queme al santo, ni tan poco que no lo alumbre”. Adicionalmente debemos intentar separar una adicción de un gusto. Un gusto es algo que deseo pero no necesariamente lo realizo.

En mi caso, a mí me encanta el chocolate. Pero no paso todo el día consumiéndolo. Si lo hiciera de forma descontrolada, entonces ya estaríamos hablando de una adicción, pues es algo que potencialmente perjudicaría mi economía, salud y hasta las interacciones con otros seres humanos.

A título personal, si tú estás pasando por un momento muy desagradable emocionalmente, en especial debes estar atento a lo que realizas, pues si una nueva actividad produce el bienestar que inconscientemente le has estado enseñando a tu cerebro, allí puede formar una adicción de dicha actividad.

Y esta nueva actividad no necesariamente te ayudaría a mejorar, si la tomamos con mucho entusiasmo.

Así que te hago una invitación a través de esta información para que analices tus adicciones. Recuerda que aquí vas a entrar en disonancia cognitiva para evadir el concepto de adicto.

Negar una disfunción te vuelve un ser más disfuncional. Hay que tener la suficiente humildad para reconocer y aceptar los problemas, pues solo así vas a encontrar las fuerzas para cambiar aquello que te impide ser feliz y vivir en bienestar.
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Ingeniero de Sistemas e Investigador del Pensamiento Humano y las emociones, y como estas influyen en las decisiones que tomamos cada segundo para tener éxito o fracaso.

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