Últimamente he estado escuchando una polémica en redes sociales sobre el término “energía masculina y femenina”.
Incluso he escuchado a algunos pacientes decir que eso no existe.
Aunque no dicen las razones de su afirmación, sino simplemente que no existe.
O sea, por fe debemos creerles.
La explicación a la existencia de esto ya la di en el vídeo titulado EL USO DE LA ENERGIA MASCULINA Y FEMENINA EN TU VIDA.
Sin embargo, no quiero atacar a nadie con esta información, sino que mi objetivo es explicar el mal entendido que se ha presentado con esto.
Digamos que técnicamente la palabra no debería ser “energía” sino actitud.
Entonces ya sería más fácil entender de que estamos hablando cuando decimos “actitud” masculina o femenina de X persona.
Por ejemplo, una actitud femenina es un hombre es escapar de las dificultades o problemas.
Con esto no estoy diciendo que si eres hombre vayas de pendejo a meterte o buscar problemas para demostrar tu hombría.
Me refiero que la actitud de un hombre frente a los problemas es la confrontación.
No evadirlos sino enfrentarlos pues de lo contrario te van a seguir persiguiendo por el resto de tu vida.
Digamos que tienes un problema respecto a la conducta de una persona hacia ti, ya sea en tu trabajo, barrio, etc.
Esta persona hipotética no te respeta y tu actitud masculina debe ser confrontar a esa persona desde el primer momento que notaste su patanería.
Mirar que es lo que te pasa contigo.
Muchos hombres suelen cambiarse de barrio, de trabajo, etc., para darse cuenta de que donde llegan, suelen encontrarse otro paciente que les va a faltar al respeto.
Lamentablemente y poco a poco a la sociedad le están quitando, en el caso de los hombres, la actitud masculina.
Se argumenta que debes deconstruirte para no ser el modelo de macho dominante que existía en el pasado.
Ahora te venden que, como hombre, tengas una actitud femenina.
Por ejemplo, a mediados del año pasado en una feria muy famosa de mi ciudad natal, pude observar a un jovencito vestido como niña.
Traía una moñita de color naranja en su pelo, labios y ojos pintados y una falda, pues se supone que esto son las nuevas “masculinidades”.
Es a esto a lo que me refiero con una actitud femenina en un hombre.
Por el contrario, a la mujer le están vendiendo una actitud masculina.
Y finalmente la mujer se está convirtiendo en el hombre que ella desea tener a su lado.
A un hombre con actitud masculina no le gustará una mujer así.
Esto para nosotros es convivir con otro macho.
Por naturaleza, los machos de todas las especies compiten entre ellos, ya sea por territorio, recursos o apareamiento.
Los seres humanos no somos la excepción por mucho neocórtex que tengamos.
Y lo mismo les pasa a las mujeres.
Por ejemplo, si eres mujer por favor confirma en los comentarios, si te gustaría estar con un hombre que se vista como señorita, con ojos y labios pintados.
Es por eso que mediante esta información quiero animarte a no dejarte lavar el cerebro con actitudes contrarias a tu naturaleza.
Si quieres vivir en bienestar no puedes ir en contra del Cosmos.